Autoridades militares y policiales del Táchira se encuentran en alerta para dar captura a un sujeto señalado de violador en serie, quien en complicidad con su padre, un expolicía (también en fuga), presuntamente huyó del Zulia el viernes, cuando se percató que su última víctima, después de seis días en cautiverio, fue rescatada por efectivos de la PNB.
La búsqueda de Renzo Molero, de 24 años, se amplió a estados vecinos del Zulia y también a Colombia.
Molero, descrito por sus vecinos como un psicópata, agresivo y con trastornos de bipolaridad, además de abusador sexual, controlaba la venta y distribución de drogas en el barrio Balmiro León, donde residía junto a su padre, y contactaba a sus víctimas a través del Facebook.
“Es un loco”, dijeron a los periodistas los vecinos, que se atrevieron a hablar sobre el joven que violó a más de cuatro mujeres en su vivienda, llamada ahora la Casa del terror.
Neidelyn Paola Arrieta Paredes, de 23 años, era abusada sexualmente a diario por Renzo Molero. No le bastaba con violarla, también la atacaba con un bate de metal y un machete si no accedía a lo que él le pidiera, revelaron los funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana que participaron en el rescate.
El infierno de la joven comenzó el 24 de febrero, cuando luego de un “coqueteo” en Facebook, ella y Renzo Molero acordaron verse en una discoteca, en la calle 72 con la avenida (15 Delicias). La pareja de Neidelyn desconocía que ella se había citado con otro hombre en el centro nocturno.
Esa noche, durante el encuentro, Neidelyn luego de ver a Molero no quiso seguir conversando con él, pero el abusador la golpeó en la cabeza, en el estacionamiento, la drogó y se la llevó.
Arrieta despertó al otro día. Tenía la cabeza partida. Fue violada varias veces y obligada a consumir drogas para mantenerla sedada.
“El violador del Facebook” tenía un cómplice que ocultaba sus aberraciones y las respaldaba: su propio padre, Tulio Antonio Molero Díaz, un oficial del Cuerpo de Policía Bolivariana del estado Zulia, jubilado hace 10 años.
“El padre del violador era quien le daba de comer a la víctima. La mayoría de los días era alimentada con arroz, huevo, pan y agua”, aseguraron fuentes de la policía.
“La muchacha fue maltratada física y psicológicamente por el violador y su padre. La dejaron bañarse solo dos veces durante los seis días. Tenía la misma ropa que usaba el día que se la llevaron raptada”, añadió el vocero.
En la casa del abusador encontraron fotos de varias mujeres desnudas, las que se presumen sean las víctimas. “Les tomaba fotos y las grababa mientras eran abusadas”, comentó la fuente.
Hasta donde se conoce, Neidelyn era la cuarta mujer que con ese mismo propósito, Renzo llevó a su vivienda. El viernes por la tarde, atendiendo una denuncia de la pareja de la muchacha, funcionarios de la PNB llegaron a la casa del par de depravados. Ellos no estaban.
En el cuarto principal hallaron a la muchacha amarrada y semidesnuda, sobre una cama. Alrededor de ella un bate, cuchillo y un machete.
Ese viernes que la muchacha fue rescatada, más temprano Molero se había drogado y dejó su celular cerca de la víctima, la cual aprovechó y envió un mensaje de texto a su pareja, quien a su vez alertó a las autoridades sobre lo que ocurría. Desde el 25 de febrero la chica era buscada por su familia en San Francisco, donde vive, y en Maracaibo.
Arrieta, actualmente recibe ayuda médica y psicológica.
El general Luis Morales Guerrero, director de la PNB en el Zulia y jefe de la Misión a Toda Vida Venezuela en la región, aseguró que todos los cuerpos de seguridad del estado están tras la pista de Renzo Molero y su padre, Tulio Antonio Molero. “Ya se han realizado varios allanamientos para dar con su paradero”, dijo. (MB)