“Hoy se celebra el día Mundial del Agua, Venezuela exhibe en la región la peor gestión de este recurso, cerca de cuatro millones de personas que viven en el espacio rural no tienen acceso al agua potable y preserva el problema ambiental más grave de América latina: La contaminación del cuenca del Lago de Valencia”
Jesús Castillo, integrante de la ONG Agua Sin Fronteras expresó que, de acuerdo a la FAO, Venezuela se encuentra entre las 25 naciones con mayor disponibilidad de agua en el mundo y entre las diez primeras de América Latina. Sin embargo, a pesar de que el recurso esta disponible hoy sus habitantes no tiene acceso por la gestión precaria de parte de las operadoras del servicio.
De igual forma, manifestó que el acceso al agua depende de infraestructura, instituciones y un marco legal que este en conjunto, lo que se conoce como Gestión Hídrica. Castillo afirmó que el país cuenta con unos 108 embalses además de muchísimos pozos profundos diseminados por el territorio nacional, sin contar con el agua que es captada de forma natural para que finalmente tenga los diversos usos.
El centralismo presente en la principal operadora HIDROVEN es el responsable del 73% de los servicios de agua y saneamiento, no permitiendo la flexibilidad a sus subsidiarias para que, eficientemente, presten un servicio eficaz. Además de ello, en el año 2001 fue sancionada la Ley Orgánica para la Prestación de los Servicios de Agua Potable y de Saneamiento, según gaceta oficial N° 5.568. La cual sufrió una reforma en el año 2007 y hasta la presente fecha carece de reglamento.
El también dirigente de Voluntad Popular, explicó que está situación deja un vacío jurídico en la trasferencia de acueductos rurales a los gobiernos locales, por lo que cerca de 4 millones de venezolanos se les viola el derecho humano al agua.
Por otro lado, este añó la ONU lo ha designado al “Agua y Saneamiento”, en ese sentid,o Venezuela tiene cero en la boleta en este apartado. Porque aún está presente la situación del lago de Valencia, con sus afectados y la crisis sanitaria que afecta cerca de 20 municipios ribereños de Aragua y Carabobo.