El actor español Antonio Banderas, que hace dos meses sufrió un ataque al corazón, asegura estar ya bien y vaticina que lo mejor de su carrera “está por venir”. EFE.
Banderas es protagonista hoy en Málaga (sur de España), su ciudad natal, donde recibe el premio a su trayectoria en el Festival de Cine en Español y en la que en un encuentro con la prensa echó la vista atrás hasta sus inicios y aseguró que, cuando cierra los ojos, todo lo que le ha pasado le parece “un sueño”.
En la rueda de prensa una de las primeras preguntas fue sobre su estado de salud, y Banderas estuvo claro: “Sufrí un ataque al corazón el 26 de enero, pero tuve mucha suerte, fue benigno y no ha dejado daños”.
“Me sometí a una intervención en la que se me implantaron tres ‘stents’ en las arterias coronarias, y como sufría arritmias desde hace tiempo, de ‘motu proprio’ me sometí a una termoablación, pero no ha sido tan dramático como se ha escrito”, explicó
Atribuyó lo ocurrido a que le metió “una paliza importante” al corazón en los últimos 37 años de su vida y afirmó que se encuentra “muy bien, con ganas de volver a trabajar”.
En los años 70 Banderas empezó a trabajar como actor en el Teatro Romano de Málaga: “Venía vestido de romano en un Vespino”, recordó hoy Banderas, que considera “extraordinario” ser profeta en su propia tierra.
Sobre su llegada a Hollywood a comienzos de los 90 con “Los reyes del mambo”, evocó que se alojaba en un hotel de Nueva York y, como no hablaba inglés, no se atrevía a llamar al servicio de habitaciones.
“Debajo del hotel había una tienda de ultramarinos donde trabajaba uno que se llamaba Rodríguez. Le buscaba, le pedía mortadela y me comía un sandwich”, dijo.
También tuvo palabras para el realizador Pedro Almodóvar, alguien a quien debe “muchísimo”, pero también un director “muy duro, con el que es muy complicado trabajar” porque un rodaje se convierte “en una especie de infierno creativo”.
Banderas cree que lo mejor en su carrera “está por venir” y quiere volver a dirigir, algo con los que disfrutó en las dos películas en que lo hizo, aunque entonces – admitió- quizás estaba “demasiado verde”, por la falta de experiencia.
También sigue pendiente interpretar a su paisano Pablo Picasso a las órdenes de Carlos Saura para mostrar el proceso de creación del “Guernica”.
“Se han salvado los problemas que había de derechos con un nuevo guión, pero no lo tengo claro. Me comprometí con Carlos con el anterior guión, que tenía un impacto emocional más profundo y un ritmo narrativo maravilloso para reflejar lo que ocurrió en esos 33 días en los que creó el ‘Guernica'”.
Espera poder recuperar ese primer guión ahora, cuando Antonio Banderas tiene 56 años, “exactamente la edad que tenía don Pablo Picasso cuando pintó el ‘Guernica'”.
Preguntado por Donald Trump, dijo que le considera “un daño para Hollywood”, y apuntó que “resulta difícil pensar que va a permanecer cuatro años en el poder”.
“Lo que da un poco de miedo es por qué la gente lo ha elegido, es un tema más complejo, de un desencanto general en el mundo con la política tradicional”, agregó Banderas.
En el momento personal que atraviesa ahora reconoció que se está “replanteando muchas cosas” después de haberse convertido durante años en un adicto al trabajo y comprobar que “no podía parar, como con las palomitas de maíz”.
Por eso quiere hacer una pausa y precisa que lo quiere hacer en su tierra, para cumplir lo que dicen unos versos de Manuel Alcántara que ha grabado en una pared de la terraza de su casa en Málaga y que recitó.
“A la sombra de una barca me quiero tumbar un día y echarme todo a la espalda y soñar con la alegría”, declamó Banderas con la voz rota por la emoción.