Rafael Curvelo, coordinador de Caracas del movimiento Alternativa Uno, denunció que los jubilados y pensionados en Venezuela tienen un ingreso equivalente a una décima parte de lo que percibe cualquier jubilado en Latinoamérica. “Hoy los pensionados viven una situación mucho más precaria que lo que ocurría en Venezuela en la década de los 90”.
Explicó que en el caso de Uruguay, un pensionado recibe mensualmente 455 dólares. En cuanto a Chile, la cifra es de 395 dólares mientras que en Ecuador, un jubilado promedio recibe 380 dólares al mes. “La mayor de las vergüenzas ocurre en Venezuela, ya que de acuerdo a la tasa Simadi, el ingreso de un jubilado es de apenas 60 dólares, lo que se convierte en unos 15 dólares si se usa como referencia el precio del dólar al que se tiene acceso, el del mercado negro paralelo”.
Destacó el caso de Bolivia, país que ha llegado a ser reconocido como uno de los de mayor avance en la región, donde se le da a los pensionados 315 dólares mensuales. Entre tanto, El Salvador y Nicaragua, países considerados de mayor pobreza en Centroamérica, cancelan 250 y 125 dólares respectivamente. “Le preguntamos al presidente Maduro: ¿Qué se puede hacer con 60 o 15 dólares en estos momentos en Venezuela?”.
Precisó que hace más de 21 días consignaron una denuncia ante el despacho del Defensor del pueblo con respecto a la situación que atraviesan en el país pensionados y jubilados, frente a los altos niveles de inflación y escasez en el país, lamentando que a la fecha no hayan obtenido respuesta. “Hoy tenemos venezolanos de la tercera edad que viven como indigentes recibiendo apenas el 27% del salario integral de un trabajador activo”.
El dirigente caraqueño calificó como “indignante” esta situación cuando en Venezuela existen medicamentos de uso frecuente en los adultos mayores que están por el orden de los 35.000 bolívares. “Nuestros abuelos prácticamente andan pidiendo dinero en las calles o buscando quien les preste para poder pagar sus tratamientos”, advirtió que además, esto debe llamar a la reflexión del Estado venezolano cuando en otros países de la región, el acceso a las medicinas por parte de la población de edad avanzada es completamente gratuito.
Exigió al presidente Maduro que asuma su responsabilidad ante la historia y pague a jubilados y pensionados el bono de alimentación que está a punto de cumplir un año de su promulgación, por unanimidad en la Asamblea Nacional el próximo 29 de marzo, ley que recibiera el visto bueno del Tribunal Supremo de Justicia mediante sentencia un mes después, el 28 de abril de 2016.
Por otra parte, celebró la iniciativa del Diputado a la AN Arnoldo Benítez al instaurar en el Parlamento la Sub comisión de pensionados y jubilados. “Esta es una iniciativa que sin duda alguna abrirá un frente en defensa de los pensionados del país para que obtengan un ingreso digno”.
Recordó las acciones llevadas adelante por Enrique Ochoa Antich, quien logró, en 1997, durante el segundo gobierno de Rafael Caldera, que la pensión de jubilados y pensionados fuera equiparada con el salario mínimo. “Aquí se ha pretendido decir erróneamente que los gobierno de Hugo Chávez y Nicolás Maduro son los únicos que han dignificado a los pensionados, cuando resulta que hay una historia previa que no puede ser ocultada”.
Advirtió que se deben tomar correctivos para la atención de los adultos mayores en el país, porque de acuerdo a información del Instituto Nacional de Estadística, INE, “Venezuela va en vías de ser una nación de tercera edad. Se calcula que para el 2020, el 10% de la población serán adultos mayores, para el 2030, de un 14%, para el 2040, de un 19% y para 2050, la cifra llegará a un 24% de la población venezolana mayor de 60 años.
Rafael Curvelo invitó a la participación masiva en la Marcha por la vida de pensionados y jubilados el próximo 29 de marzo. “La defensa de los adultos mayores y las pensiones tiene que ser una lucha fundamental a partir de este momento a favor de los más vulnerables de nuestra sociedad”.
Prensa de Solidaridad