La fiscalía surcoreana pedirá una orden de arresto contra la expresidenta Park Geun-hye, indicaron este lunes pocos días después de la indagatoria de la exmandataria por los casos de corrupción y abuso de poder que le valieron su destitución.
AFP
La destitución de Park, de 65 años, fue confirmada a principios de mes por la Corte Constitucional surcoreana, poniendo fin a su inmunidad. Su procesamiento era una demanda de millones de personas que salieron a las calles durante semanas para protestar en su contra.
Es sospechosa de numerosos delitos, entre otros el de ser cómplice de su confidente Choi Soon-sil, juzgada por haber utilizado sus relaciones para obtener decenas de millones de dólares de los conglomerados surcoreanos.
“La acusada abusó de su enorme poder para recibir sobornos de compañías o para infringir el principio de libre administración de las empresas y filtrar importantes informaciones confidenciales sobre temas de Estado. Estos son temas graves”, indicaron los fiscales en un comunicado.
“Se recuperó una gran cantidad de pruebas pero hasta ahora la acusada niega la mayoría de los cargos, y hay un riesgo de que se destruyan pruebas”, añadieron.
Choi Soon-sil ya está siendo juzgada y los fiscales afirmaron que si no se detiene a Park “sería contrario al principio de equidad”.
El comunicado no precisa explícitamente si los fiscales ya pidieron la orden de arresto. AFP.