Jaimie Wilson siempre supo que nació en el cuerpo equivocado y por esa razón, a sus 19 años, decidió tomar acciones al respecto.
Este ícono de la comunidad a LGBTIQ en Estados Unidos, su país natal, contó por todo lo que debió pasar hasta convertirse en quien quería.
“Cuando tenía 15 supe por un hecho de que era hombre, pero como nací y creí en un hogar muy conservador y religioso tuve que poner mi identidad y mis sentimientos a un lado hasta que pudiera hacerlo por mi cuenta. Sabía que la situación no sería buena o segura si lo revelaba tan joven”, dijo.
En ese sentido, explicó que por mucho tiempo ingresó a los probadores de las tiendas masculinas para probarse la ropa: “Tenía un cajón en mi habitación en el que guardaba toda mi ropa masculina y, cuidadosamente, había puesto una capa de ropa femenina encima de modo que si mis padres pasaban por mi habitación no la encontraran”.
Finalmente, compartió en su Instagram las imágenes de su increíble transformación.
“La transición física fue el mejor sentimiento. Recuerdo cuando corté mi largo cabello y me sentí como nuevo”, manifestó. Pero también debió transitar el camino de las hormonas, lo que le permitió ahondar más en los cambios que podía observar
“Perdí muchos amigos”, reconoció Jaimie con dolor. “Lo veo de esta forma. Sólo cambié mi apariencia, entonces quien me rechaza por mi transición claramente sólo le agradaba por cómo me veía por fuera, no cómo era por dentro… porque eso no cambió”, finalizó.