El papa Francisco declaró este viernes en Egipto que “ninguna violencia puede ser perpetrada en nombre de Dios porque profanaría su nombre”.
En un acto celebrado en la institución sunita Al Azhar, el papa argentino aseguró que la religión no es la causa de conflictos, sino su solución, mientras que “los populismos demagógicos” no ayudan “a consolidar la paz”.
“Juntos, desde esta tierra de encuentro entre el cielo y la tierra, de alianzas entre los pueblos y entre los creyentes, repetimos un ‘no’ alto y claro a toda forma de violencia” añadió el jefe de la Iglesia católica.
“Sólo sacando a la luz las turbias maniobras que alimentan el cáncer de la guerra se pueden prevenir sus causas reales” explicó el papa, para quien el verdadero culpable de los conflictos que azotan la región de Oriente Medio es el tráfico de armas.
“Para prevenir los conflictos y construir la paz es esencial trabajar para eliminar las situaciones de pobreza y de explotación, donde los extremismos arraigan fácilmente” advirtió.
El Papa Francisco llegó a Egipto para una visita de poco más de 24 horas en medio de importantes medidas de seguridad.
Tras reunirse con el presidente Abdel Fatah Al Sisi y el gran imán de Al Azhar, tiene previsto acudir a una iglesia copta que sufrió un ataque yihadista a finales de diciembre. AFP