Más de un mes de protestas sociales y el gobierno se niega a escuchar al pueblo. Una inmensa mayoría que pide cambio, libertad y paz frente a una minoría que busca eternizarse en el poder.
44 venezolanos han caído a manos de la represión, según el Observatorio de Conflictividad Social. Venezolanos que salen a la calle desarmados con la única intención de defender a su país y su futuro. Que se miden en una lucha desigual con este gobierno represor.
Mientras más de 6 millones de venezolanos comen de la basura, el gobierno de Nicolás Maduro se gasta el presupuesto para alimentar a un niño por un mes en 5 lacrimógenas. Hablan de una Fuerza Armada antiimperialista, pero tienen a sus hijos estudiando en Estados Unidos, Europa o Australia, mientras los nuestros a veces no tienen ni la posibilidad de llevar alimentos para la escuela.
Nuestro pueblo o muere de hambre o lo mata esta represión indiscriminada y brutal que es ordenada por un grupito de cobardes que no quiere salir del poder.
Se les olvidó que el poder es para ayudar, servir y mejorar. El poder no es que para beneficiarse unos cuantos, sino para ayudar al colectivo, algo que no ha terminado de entender este gobierno.
La respuesta a este gobierno torturador es, a más represión más calle. Nadie puede quedarse de brazos cruzados. Llegó la hora de salir a defender nuestro futuro.
Venezuela nos necesita a todos. Juntos somos más y cada uno de nosotros es necesario. Desde los que desde su casa tocan la cacerola o los que nos mantienen informados hasta los que día a día se suman a esta protesta desde las calles.
Vamos Venezuela, cada vez estamos más cerca de alcanzar nuestro sueño. No podemos desmayar. Juntos lo vamos a lograr.
Vamos Bravo Pueblo de Venezuela!