Un zoológico británico investigaba este martes la muerte de una cuidadora atacada por un tigre, al que otros cuidadores tiraron carne para tratar de alejarlo de su colega.
El incidente, ocurrido el lunes, provocó la evacuación del zoológico de Hamerton, en el este de Inglaterra.
La madre de Rosa King, la víctima del tigre, que tenía 33 años, explicó que le encantaba cuidar de los animales.
“No lo hubiera cambiado por nada, era lo que había hecho siempre y lo que siempre quiso”, dijo la madre, Andrea, explicando que su hija llevaba 14 años trabajando en el zoológico.
La policía del condado de Cambridgeshire, al que pertenece el zoológico, dijo que no había circunstancias sospechosas y que el tigre no fue sacrificado.
“Un tigre entró en una jaula con una cuidadora. Desgraciadamente, la mujer murió en el lugar”, dijo la policía.
King cuidaba de los animales carnívoros.
Según su página en internet, el parque alberga tigres de Malasia y Bengala.
La BBC citó a un testigo que explicó que oyó gritos y vio a otros empleados tirando carne en la jaula para alejar al animal.
El zoológico anunció que permanecerá cerrado hasta que se aclaren las circunstancias del incidente, pero insistió en que el público no corrió ningún peligro.
Garry Chisholm, de 59 años, un fotógrafo aficionado que conocía a King de sus visitas al zoo, dijo que el parque giraba en torno a ella.
“Rosa no era solamente una cuidadora del zoo de Hamerton, era el zoo de Hamerton”, explicó a la AFP.