El SOS que lanzó un grupo de médicos en Ciudad Bolívar, hace más de una semana, a la terrible situación que padece la salud en la entidad, no ha tenido más que respuestas mediáticas por parte de las autoridades regionales en el estado Bolívar.
Nota de Prensa
El Complejo Hospitalario Universitario Ruiz y Páez, que una vez fue referencia nacional, sigue siendo prueba cierta de la precariedad que existe en el sistema de salud público. La falta de insumos, agua y el estado de insalubridad fue parte de la denuncia de los galenos del centro asistencia en Ciudad Bolívar, en una rueda de prensa, donde decidieron romper silencio, y dejar de ser cómplices.
Marcos Lima, médico endocrinólogo, profesor universitario y miembro de la Sociedad Venezolana de Endocrinología, aseguró que no sólo “los médicos no hemos sido escuchados, sino que se nos ha descalificado” en las denuncias.
El especialista ratificó en la conferencia “Situación del sector salud en Venezuela: Realidades y propuestas”, realizada en el Salón de Usos Múltiples de Apudo Bolívar en Ciudad Bolívar, lo que es “notorio y público como la salud está pasando por su peor crisis en la historia moderna de Venezuela”, enfatizando el caso regional.
La actividad académica, a la que fueron invitados, y no asistieron, el gobernador Francisco Rangel Gómez y el director del Ruíz y Páez, Doctor Jesús Ucero, estuvo basada en cifras con evidencias, publicadas por el propio Ministerio del Poder Popular para la Salud.
El crítico estado de la salud fue denunciado a las instancias regionales, manifestó el galeno, y señaló el encuentro, tras la marcha de los batas blancas, con la titular del Instituto de Salud Pública (ISP), Ana Ginet Morales, quien sólo se ocupó de atribuir la escasez al bloqueo de las empresas farmacéuticas, y asegurar como solución a este problema la Constituyente. La responsable de la salud en el estado, hasta prometió gestionar una reunión con el gobernador del estado, que todavía están esperando.
A los galenos, que hace una semana acudieron al Consejo Legislativo del estado Bolívar (Cleb), para solicitar mediante comunicación un derecho de palabra, el presidente y legislador Kamal Naim los tildó de “saboteadores”, “mercantilistas”, “vagabundos” y cualquier otro improperio y acusación que se le pudo ocurrir para descalificar, y negar la situación paupérrima del centro asistencial y hospitalario.
Lima señaló que los médicos apuestan a que pueda existir un digno sistema público de salud, “porque el éxito de la gestión de las autoridades en salud es el éxito de toda la población”, y así se lo hemos hecho saber a las autoridades del estado.
Cifras que no mienten
Efectivamente, Lima esbozó en cifras la realidad de la salud en el estado, empezando por la situación de la malaria en la región, que indican un aumento exponencial de esta epidemia, de acuerdo al último boletín epidemiológico del Ministerio del Poder Popular para la Salud.
La malaria, para el año 2016, registró 76% de casos con respecto al año 2015, de los cuales 180 mil casos corresponden al estado Bolívar, con una alta incidencia parasitaria anual, al igual que en Amazonas y Delta Amacuro.
Lima señaló que esto significa que el vector ha migrado a zonas urbanas, con el agravante que no hay tratamiento para tratar la enfermedad, “y esto conlleva a un mayor número de complicaciones, porque se genera resistencia parasitaria”.
Los datos oficiales reportados son “escalofriantes”, según señaló el médico, porque “las muertes por malaria se incrementaron de manera alarmante”, siendo que en “el año 2012 se registraron apenas 12 personas fallecidas, mientras que en el 2016 murieron 150 personas por malaria en Venezuela”.
Es decir, que en los últimos cuatro años la mortalidad por malaria se incrementó 15 veces más en el país, y la mayoría de esas muertes se reportaron en el estado Bolívar.
Lima, además, se refirió a la aparición del Zika, con 49.326 casos en el 2016, y una taza de morbilidad de 158 casos por 100 mil habitantes. Esta región no sólo reporta alta incidencia de
malaria, sino además, Zika, dengue, chikungunya y difteria, que estaba erradicada en el país.
Temen más muerte de neonatos
La carencia de vacunas BCG, antibióticos y otros insumos, para los recién nacidos o neonatos se extiende en el tiempo, y así lo ha notificado el equipo médico en el Ruiz y Páez.
Lima advirtió la gravedad del asunto, que podría desatar un repunte en el 2018 de enfermedades tan graves como la tuberculosis, y la misma difteria.
El galeno alarmado teme el incremento de la mortalidad para el próximo año de no atenderse a tiempo el problema, y darle solución urgente con un canal humanitario.
Las cifras de mortalidad materna en el 2016 reportaron 136 casos por 100 mil habitantes, con un incremento de 65% con respecto al año anterior. El médico señaló que el estado Bolívar registró 75% de mortalidad materna, teniendo que 51 embarazadas fallecieron con relación a las 22 registradas en el 2015.
En una gráfica, tomada hace dos semanas (todo sigue igual), mostró las condiciones paupérrimas e insalubres en que laboran en la sala de parto y en quirófano del Ruíz y Páez, donde los galenos lavan sus manos con una “perola” de agua, por la falta de suministro de agua en estos servicios hospitalarios.
Para el doctor Marcos Lima la realidad en los hospitales supera cualquier hecho de ficción.
En cuanto a la mortalidad infantil, señaló que no sólo la infantil aumento, sino también los neonatos de manera sorprendente, y destacó como el Ruiz y Páez aparece en el décimo lugar de los 25 hospitales en todo el país que reportan mortalidad de neonatos, por encima del Hospital Raúl Leoni de San Félix en el puesto 16.
De acuerdo al boletín, señaló que “en el 2016 fallecieron 284 niños menores de un año en el Ruíz y Páez, algo realmente catastrófico, y para que cualquier gobernador o gerente de salud se sentará a ver qué está pasando en su estado”.
Para finalizar el doctor Marcos Lima espera que se rectifique en las políticas de salud, y se atienda a la brevedad la crítica situación de la salud, advirtiendo que no quieren mueran más pacientes por falta de medicinas y condiciones de los hospitales.
