El Ayuntamiento de Lisboa anunció este domingo que reforzará las medidas de seguridad en la vía pública, sobre todo en las zonas de mayor afluencia de turistas y viandantes, tras los atentados ocurridos esta semana en Barcelona, España. EFE
El objetivo es “mejorar la protección en zonas con elevada afluencia de personas”, principalmente en el céntrico barrio de Chiado, la concurrida y comercial Rua Augusta, y el Monasterio de los Jerónimos, explicó en un comunicado el Ayuntamiento de la capital portuguesa.
Los refuerzos que se colocarán en la vía pública, consensuados con la Policía de Seguridad Pública (PSP), serán compatibles en caso de que sea necesaria alguna intervención urgente de socorro, con el fin de que bomberos o ambulancias puedan actuar con rapidez.
El primer ministro de Portugal, António Costa, aseguró hoy, tras asistir a la misa oficiada en Barcelona en homenaje a la víctimas de los atentados de Cataluña, que es partidario de la colocación de obstáculos para dificultar la circulación.
No obstante, precisó que deben ser “obstáculos móviles” para que no molesten en caso de que sea necesario alguna intervención de urgencia.
El pasado jueves, tras conocer el ataque en La Rambla, donde una furgoneta arrolló a una multitud, Costa dijo que no había “ningún indicador de riesgo” para aumentar en Portugal el nivel de alerta antiterrorista, que se mantiene en “moderado”.
Portugal acostumbra a realizar refuerzos de seguridad en fechas en las que se esperan mayores aglomeraciones, como en fin de año, aunque manteniendo el nivel de amenaza terrorista en “moderado”.
Además, desde noviembre de 2015 las patrullas de Policía están reforzadas en el centro de las ciudades y en centros comerciales.