El peleador irlandés de artes marciales mixtas Conor McGregor, que perdió ante el púgil estadounidense Floyd Mayweather por nocáut técnico en el décimo asalto del combate en el que debutó como boxeador, consideró que la pelea “fue divertida” pero que el árbitro “se precipitó” al pararla, reseñó EFE.
“Fue una pelea divertida y espero que todos ustedes la hayan disfrutado”, declaró McGregor, que reivindicó que podía haber continuado en el combate y lamentó que el árbitro le cortase el ritmo cuando mejor estaba.
“Me tenía que haber dejado seguir con el golpeo por detrás, porque él (Mayweather) se daba la vuelta de forma intencionada”, opinó el irlandés.
Mcgregor reconoció, con todo, que el campeón invicto estadounidense, que dejó su marca en 50-0, la mejor de todos los tiempos al superar la de Rocky Marciano, siempre tomó buenas decisiones sobre el cuadrilátero.
“Demostró que es un peleador muy centrado, rápido, que no comete errores y que selecciona bien tanto sus movimientos como los golpes”, destacó McGregor. “Pero creo que cuando el árbitro decidió parar la pelea estábamos en la lucha. De hecho, considero que tenía 5-4 arriba con los nueves asaltos anteriores”.
Sin embargo, las cartulinas de los tres jueces mostraron todo lo contrario. Solo uno le dio a McGregor ganador de tres asaltos; los otros dos le dieron la victoria en uno y en el noveno le pusieron 10-8 a favor de Mayweather.
“Pienso que era un combate igualado y que el árbitro se precipitó a la hora de pararlo, dado que simplemente estaba un poco fatigado”, expresó McGregor en rueda de prensa.
Pero las imágenes de la pelea muestran cómo recibe hasta doce golpes seguidos al rostro sin responder a ninguno.
“Tengo que darle crédito porque sus golpes fueron muy precisos”, admitió sobre su rival.
McGregor reiteró que se sentía satisfecho con el intercambio de golpes y por haber forzado a Mayweather a comportarse como un púgil mexicano que siempre ataca para conseguir la victoria.
“Lo convertí en un mexicano esta noche, peleó como mexicano”, dijo McGregor al finalizar la pelea, reconociendo la agresividad del púgil estadounidense, que cumplió con la promesa de terminar por la vía corta y no dejar a los jueces la oportunidad de decidir la pelea.
McGregor insistió: “Gané los primeros tres asaltos, el cuarto estuvo parejo, por lo que estábamos arriba en la pelea cuando la pararon. Me sorprendieron las calificaciones de los jueces”.
El peleador irlandés se llevó una bolsa garantizada de 35 millones de dólares, que podrá incrementar con el porcentaje que reciba de la venta de la televisión de pago.
En cuanto a la experiencia de haber debutado en el mundo del boxeo, destacó que era muy diferente al de las artes marciales mixtas.
“El cheque fue muy bueno, pero el deporte del boxeo es muy diferente y complicado”, subrayó McGregor, de 29 años. “Ahora debo pensar de nuevo en las artes marciales mixtas”.
Por su parte, Dana White, el presidente de la UFC, la organización más importante de las artes marciales mixtas, dijo que se sentía orgulloso del comportamiento de McGregor en el cuadrilátero.
“Estoy muy orgulloso de Conor (McGregor), fue una pelea diferente a lo que esperaba, hizo diez asaltos y eso es algo muy importante”, declaró White tras concluir la pelea. “Es un deportista muy raro y especial, que lo da todo en cada cosa que hace. Creo que si hubiese comenzado como boxeador profesional habría sido muy bueno”.
White no piensa que haya más combates similares con otro representante de las artes marciales mixtas.
“No lo creo. Aunque McConor demostró que pudo competir con uno de los mejores boxeadores de las últimas décadas y le conectó hasta 111 golpes”, señaló White.
Sin embargo, ni uno de los golpes que McGregor conectó al cuerpo y al rostro de Mayweather le generó el mínimo daño externo o le puso en riesgo de irse a la lona, que era lo que había ‘prometido’ un día antes de la pelea, y además hacerlo en el primer asalto.