La desesperación de las familias en medio de las evacuaciones hacia los centros de refugio por las catastróficas inundaciones causadas por la tormenta Harvey no deja atrás a las mascotas, que son rescatadas con el esfuerzo que significa llevar a un animal angustiado en el escenario causado por el desastre natural, reseña Infobae.
Una de las historias más conmovedoras ocurrió en un refugio de la Cruz Roja que no aceptaba mascotas. La familia Bice no estaba dispuesta a dejar atrás a sus dos perros y su gato, por lo que optaron por dormir afuera de la sede en Aldine, Texas.
Varias víctimas prefieren dejar parte de sus pertenencias atrás con tal de tener fuerza y espacio para llevar a sus fieles acompañantes. Muchos ni siquiera dudan en la decisión y tienen claras sus prioridades.
Vea algunas de las fotos más conmovedoras: