La canciller alemana, Angela Merkel, abucheada por ultraderechistas en sucesivos mítines, subrayó hoy que la derecho de reunión es un pilar de la libertad y aseguró que seguirá con sus actos de campaña en lugares donde no es recibida “amablemente”, reseña EFE.
“Muchas personas que no participan en esos conciertos de silbatos y coros de gritos necesitan aliento para seguir mostrando coraje civil y para enfrentarse al odio”, manifiesta en una entrevista con el grupo mediático “RedaktionsNetzwerk Deutschland”.
Quienes se dan cita en sus actos de campaña para boicotear sus discursos, incitados por el partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) o el movimiento islamófobo Pegida, esgrimen pancartas denunciando la política de acogida de refugiados de la canciller.
“Somos una democracia en la que todo el mundo puede expresar su opinión. Pero es indignante el odio hacia todas aquellas personas que de alguna manera son rechazadas por ser extranjeras o diferentes”, subraya.
“No puede haber ningún tipo de tolerancia frente a la xenofobia, el antisemitismo o la homofobia”, continuó la canciller y candidata de la Unión Cristianodemócrata (CDU, quien aspira a la reelección en las generales del 24 de septiembre para un cuarto mandato.
En la entrevista, vuelve a referirse a las tensas relaciones con Turquía y a su apuesta por suspender las negociaciones de adhesión del país a la UE, asunto que apostó por que sea debatido en el Consejo Europeo de octubre.
La decisión al respecto debe ser adoptada por unanimidad y sin peleas entre los Estados miembros, recalcó antes de recordar que ella “heredó” esas negociaciones de su predecesor en la Cancillería, el socialdemócrata Gerhard Schröder.
A diferencia del Partido Socialdemócrata (SPD), su actual socio en la gran coalición, la CDU nunca ha sido partidaria de la entrada de Turquía en la UE, añade.
Merkel recordó a los alemanes encarcelados en Turquía por motivos políticos y consideró que un país que no cumple las reglas del estado de derecho no puede de forma paralela mantener negociaciones con Bruselas, pero abogó al mismo tiempo por mantener el diálogo con Ankara.