Tamara Farías, vecina del sector Macundamar en Tanaguarena, informó que en las últimas semanas han hallado más de cuatro tipos de chipos diferentes. “Pedimos a las autoridades de la Dirección Ambiental de Salud que acudan a la comunidad para que evalúen el ambiente y eviten la propagación de más chipos. Desconocemos si están o no infectados con el parásito que genera el mal de chagas, pero estamos preocupados”, reseña La Verdad de Vargas.
La semana pasada, el epidemiólogo regional, Julio Pacheco, recomendó a la población capturar los chipos y conservarlos en frascos de vidrio con ventilación y un algodón con agua, y los trasladen vivos a la Dirección de Salud Ambiental.