Los precios de los bonos emitidos por Venezuela y la petrolera PDVSA caían con fuerza el jueves, en medio de las preocupaciones sobre su liquidez y los obstáculos regulatorios que podrían impedir que la compañía estatal cumpla con un importante pago de deuda que vence el viernes.
El PDVSA 2017N, que vence el 2 de noviembre, caía casi 5 puntos para cotizar cerca de los 88,500 centavos de dólar, mientras que el bono soberano 2022 caía 3,5 puntos hasta con un rendimiento de 49,7 por ciento.
Petróleos de Venezuela (PDVSA) <> deberá pagar el viernes 985 millones de dólares por amortización e intereses de su bono al 2020. El jueves próximo, en tanto, tiene que cancelar otros 1.170 millones de dólares por vencimiento y cupones.
La preocupación de los inversionistas viene en aumento desde que el Gobierno de Venezuela y PDVSA comenzaron a demorar desde principios de mes los pagos de los rendimientos de sus papeles, elevando los temores del mercado sobre la capacidad de la estatal para cumplir los compromisos del viernes.
La petrolera venezolana habría cumplido con el pago de unos 41 millones de dólares a los tenedores del bono 2037, dijeron cuatro operadores el jueves. Pero aún hay retraso en la cancelación de otros 500 millones de dólares en intereses que tocaba pagar este mes por títulos de PDVSA y papeles soberanos.
PDVSA dispone de un período de gracia de 30 días para cancelar los intereses, pero los retrasos crean preocupación entre inversionistas en medio de las sanciones financieras impuestas por Estados Unidos al gobierno y la firma, que han obstaculizado el uso del sistema de pagos internacional.
Si PDVSA se demora en realizar el pago del viernes, entraría en un incumplimiento de pagos, pues en este caso no hay período de gracia. La empresa ha resaltado en muchas oportunidades su compromiso a cumplir con su deuda.
Ni la compañía, ni el Ministerio de Comunicación del país petrolero contestaron a los pedidos de comentarios.
Reuters