Un violento incendio que arrasó este jueves una fábrica de fuegos artificiales en la periferia de Yakarta dejó al menos 46 muertos y decenas de heridos, y provocó explosiones y una espesa humareda negra.
El incendio comenzó hacia las 09H00 (02H00 GMT) en un complejo industrial de Tangerang, donde los bomberos combatieron las llamas durante horas, antes de extinguir el fuego al final de la tarde.
El último balance ascendía a 46 muertos, declaró el jefe de la policía de Tangerang, Harry Kurniawan.
“Hay 46 bolsas para cadáveres, seguimos sin tener noticias de diez personas, las evacuaciones continúan”, declaró Kurniawan a la AFP.
Un total de 103 empleados trabajaban en la fábrica, declaró por su parte un responsable de la policía de Yakarta, Nico Afinta, a la cadena de televisión indonesia Kompas TV.
Las víctimas estaban calcinadas y estaban “prácticamente irreconocibles”, declaró un bombero desplegado en el lugar, Oni Sahorni, a la cadena Metro TV
Se derrumbaron parte de los edificios de la fábrica, en cuyos alrededores había vehículos calcinados, en medio de una negra humareda.
Un habitante del barrio, Beni Benteng, declaró a la AFP que había oído una explosión y a personas que estaban dentro de la fábrica, pidiendo ayuda a gritos.
“Mis amigos y yo, y policías, abrimos un hueco en una pared para que la gente pudiera escapar, los obreros salieron a continuación. Vi a gente y, entre ellos, a mujeres saltando desde lo alto, ¡Dios mío!”, explicó Beni.
– Fuertes explosiones –
El incendio se declaró cerca de la puerta de entrada de la fábrica y se propagó rápidamente, indicó la policía, que abrió una investigación.
“Se hallaron víctimas apretadas en el fondo, parece que querían evitar el fuego de la puerta de entrada”, declaró Afinta a Metro TV.
Testigos contaron a la televisión que habían oído dos explosiones fuertes de madrugada. La factoría, un complejo cercano a un barrio residencial, estaba operativa desde hacía seis semanas, declaró a Metro TV un responsable del distrito, Toni Rustoni.
Ade, que sufrió quemaduras en brazos y piernas, dio su testimonio en un pasillo del hospital.
“No sé cómo sucedió. Estaba trabajando en el exterior de la fábrica y hubo explosiones. Cuatro vehículos explotaron y casi todas las motos también explotaron”, declaró a la AFP.
Diana, de 20 años, expresó su conmoción al saber que su hermana, de 15 años y que llevaba dos semanas trabajando en la fábrica, había resultado gravemente herida en el incendio.
“Espero que la empresa asuma sus responsabilidades […] y pague por todo, quiero que mi hermana se recupere”, declaró a Metro TV.
AFP
Fotos Reuters