Un joven de 22 años murió en Cuba a consecuencia del ataque de un tiburón cuando se bañaba con un grupo de personas durante la noche en la playa de Guardalavaca, en la provincia oriental de Holguín, informaron hoy medios oficiales. EFE
El escualo “embistió contra tres parejas que disfrutaban de un baño nocturno” a menos de tres metros de la orilla en ese conocido balneario y mordió a la víctima en la pierna, según recoge el sitio web estatal Cubadebate, que precisa que el suceso tuvo lugar la noche del sábado.
Las personas que se bañaban junto con el fallecido lograron espantar al tiburón golpeándolo con una botella.
Aunque el joven, vecino de la ciudad de Holguín (a 748 kilómetros de La Habana), fue trasladado de inmediato a la cercana Clínica Internacional de Salud y Turismo de Guardalavaca, falleció a los pocos minutos de su ingreso.
El hombre llegó al centro médico bajo shock hipovolémico y “presentaba una amplia y profunda mordida de animal marino en su muslo izquierdo que debió afectarle la arteria femoral”, señaló el doctor Enrique Remedios, quien atendió el caso.
Según la prensa cubana no hay antecedentes de ataques de tiburones en esta playa cubana, que es uno de los principales destinos turísticos del oriente de la isla.
El diario local Ahora recuerda que aunque la mayoría de las especies de tiburón que habitan las aguas costeras cubanas no representan peligro para el hombre, “no se recomienda el baño nocturno en el mar, pues generalmente estos animales depredadores marinos se alimentan en las tardes, noches y al amanecer”.
El primer ataque documentado de un escualo en las costas del país caribeño se remonta a enero de 1749 y ocurrió en la bahía de La Habana.
En la última década solo hay otro ataque de este tipo registrado en aguas cubanas: en abril de 2009, un hombre estadounidense sobrevivió tras ser mordido por un tiburón en la pierna cuando practicaba pesca submarina en la bahía de Guantánamo.