Un grupo de unos 250 emigrantes cameruneses fueron repatriados hoy desde Libia después de que la Unión Africana (UA) pidiera a sus países miembros que devolvieran a casa a sus ciudadanos en este país del norte del continente, en el que se investigan supuestas ventas de esclavos subsaharianos. EFE
En el grupo, formado en su mayoría por jóvenes, hay nueve mujeres embarazadas, y aterrizaron a lo largo de la noche en el aeropuerto internacional de Yaundé, la capital del país.
Uno de ellos, Frank, declaró a la prensa: “Los libios no tienen consideración alguna por los negros. Nos tratan como animales. Violaban a las mujeres, no nos daban apenas de comer, no había apenas agua en los almacenes donde nos hacinaban”.
La polémica estalló hace unos días cuando la cadena estadounidense CNN emitió un vídeo que mostraba una supuesta venta de emigrantes subsaharianos como esclavos en territorio libio, lo que ha provocado protestas de varios países africanos y la intervención de la UA.
Un portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Charles Evina, lamentó que aún quedan al menos 1.700 cameruneses “en apuros” en Libia.
Los que regresen a Camerún serán asistidos por un programa de reintegración, y cada uno recibirá 65.000 francos CFA (117 dólares, 99 euros) a su llegada, confirmó Evina.
Mientras tanto, el Gobierno camerunés guarda silencio al respecto, aunque la sociedad civil sí se haya pronunciado: este lunes, un centenar de manifestantes protestaron ante la embajada de Libia en Yaundé.
Con una tasa de desempleo oficial por encima del 13 %, muchos jóvenes cameruneses se marchan del país buscando una vida mejor en Europa.
La UA reclamó el martes a los Gobiernos de los países cuyos ciudadanos están afectados por este escándalo que se comprometieran a apoyar la repatriación de sus inmigrantes en Libia, a donde la institución ha enviado un emisario para colaborar con el Ejecutivo de Trípoli en la identificación de los inmigrantes.
Tanto la UA como Libia han abierto investigaciones para identificar y llevar ante la Justicia a los responsables de la venta de esclavos.