VOTO. Muchos me preguntan qué debemos hacer los ciudadanos ante el reto electoral del 10D. Lo primero que debo aclarar es que yo sigo siendo creyente en el voto como arma de lucha política. Por eso voy a votar con la convicción de estar haciendo lo correcto en la próxima cita comicial. Lo haré porque creo en el ejercicio de la ciudadanía. No creo en la abstención y mucho menos en quienes promueven el no votar, pero no aportan un plan alternativo más allá de sus arengas contra el régimen. Cuando no votamos estamos facilitando al gobierno sus maniobras para ajustar los resultados electorales. Cuando la población vota masivamente y además la oposición afina su estructura de defensa del voto, no se producen esas fallas que se traducen en victorias del oficialismo. Tomando una frase de mi amigo Ronald Rodríguez: “La abstención es la nada”. Pero además el 10D tiene significados especiales. En primer lugar, porque el gobierno busca apoderarse de todas las alcaldías del país y así ampliar su base de respaldo político. Si la oposición le cede todo eso se quedaría sin nada, pero estaría además marcando el camino hacia su desaparición. Y cuando hablo de oposición no lo digo fundamentalmente por los partidos, sino por el ciudadano. Y en el caso del Zulia tiene mayores significados. No podemos dejar el camino libre para que lo peor del oficialismo que representa la violencia e intolerancia se apodere de los espacios que son vitales para la solución de los problemas. Los candidatos de Maduro en el Zulia de ganar no harán gestión, sino que se dedicarán a sembrar el terror y acabar con cualquier vestigio de disidencia. Sería un error no votar y ayudar a quienes no merecen, ni tienen la capacidad para ocupar la Gobernación y las alcaldías del Zulia. Estimado lector lo invito a votar. Ese es un ejercicio democrático que no podemos dejar de cumplir. No hacerlo sería una equivocación.
SE MUEVE (I). La crisis económica se aceleró de tal forma, que también aceleró la crisis interna en el gobierno. Tal como hemos venido advirtiendo, las cosas no están nada bien en el oficialismo, a pesar que hacia la opinión pública es pura felicidad y armonía. El deterioro de la economía superó las proyecciones de los más pesimistas, pero además se profundizó la ausencia de gobernabilidad. La situación del régimen se hizo más compleja, porque las sanciones individuales han disparado su “costo de salida”, pero además los graves problemas económicos y sociales amenazan con alborotar de nuevo su único refugio, por ahora, que es Venezuela. A eso se suma la necesidad de adelantar las elecciones presidenciales, pero no tienen un candidato claro y que reúna el perfil que necesitan para generar un consenso interno. Todos los días surgen nuevas señales que dan pistas sobre la inestabilidad interna. Debo aclarar que en todo eso nada, absolutamente nada tiene que ver la oposición partidista. Ellos no existen en ese problema que es interno, por ahora, y que amenaza con perturbar severamente la permanencia en el poder de Nicolás Maduro, más no del chavismo. Eso lo sabe el “Madurismo” y mueve sus piezas para evitar su caída ¿Cuáles son las señales? La exclusión en el diálogo de los radicales, el “peliculezco” escape de Antonio Ledezma, la crítica de Rafael Ramírez, los señalamientos de José Vicente Rangel, la detención de los gerentes de Citgo y el silencio absoluto que reina sobre las elecciones presidenciales que deberían ser el 4 de febrero o el 4 de marzo de 2018, entre otras cosas. Sobre todo el colapso económico que parece estar muy cerca está removiendo los cimientos del oficialismo. Comienzo con la crisis económica y la estabilidad de Maduro. En columnas anteriores hemos venido desarrollando los detalles del mayor enemigo que tiene el gobierno en este momento: el cataclismo en la economía, pero sobre todo la hiperinflación. Aunque Maduro no tiene la responsabilidad exclusiva del desastre, la mayoría de la población lo señala como el mayor culpable. Ante esa reacción popular el mayor problema para la subsistencia del oficialismo es precisamente Maduro en el gobierno. Con la salida de Maduro y su sustitución por otro oficialista no se resolverá el problema. Eso sólo traería un muy corto compás de espera para que la población observe la respuesta del nuevo Presidente. El problema de la crisis económica es de forma y fondo dogmático ¿Por qué dogmático? Porque el legado de Chávez es una camisa de fuerza que les impide darle una patada al modelo, lanzarlo al cesto de la basura y hacer el viraje que necesita la postrada economía nacional. Como hemos comentado hay preocupación en los sectores más sensatos que piden actuar para resolver el problema y de ahí los cuestionamientos hechos por José Vicente Rangel, que más que una queja personal parecen un mensaje directo de algunos sectores dentro del oficialismo. Mientras que los “ultras” ven peligrar su posición de poder. Muchos podrían estar pensando en una sustitución. Fíjense que ya no hablamos de “sucesión”, sino de “sustitución” ¿Cuál es la diferencia? Que la primera es voluntaria y consensuada, la segunda no lo es. La “sustitución” podría ser “tipo Mugabe” ¿Cómo es eso? Una definitiva ocupación militar del gobierno y la “exhortación “al Presidente para que ceda el poder y así bajar las tensiones y ganar tiempo ante el malestar social. Si usted analiza todo lo que está ocurriendo, verá que las condiciones para un cambio como éste están dadas y de sobra. La gestión de Maduro no tiene capacidad de respuesta ante los problemas porque carece de gobernabilidad y gobernanza, pero si por casualidad deciden actuar como parte de una epifanía de cordura, tampoco tiene la credibilidad que se requiere ante la población. Anunciar cambios en la conducción de la economía no sería creído por las mayorías, que lo verían como otra medida de distracción del régimen. El primer mandatario está en una encrucijada peligrosa. Lo sabe y actúa en consecuencia.
COLAPSO. Parece que cada día está más cerca el colapso de la economía. Los venezolanos perdimos la capacidad de asombro ante el deterioro de la calidad de vida, el incontrolable aumento de precios y la inercia de un gobierno que va cantando aguinaldos navideños, mientras el hambre avanza sin freno. El duro cuestionamiento de José Vicente Rangel por la ineficacia de la gestión de Maduro ante los problemas económicos, es un mensaje claro de algunos sectores racionales que ven como el avance arrollador de la crisis los puede aplastar a ellos en su pretensión de sostenerse en el poder. Dudo mucho que esas palabras sean una queja personal de alguien que es vocero no oficial de tendencias del oficialismo. El desastre económico es un tema de permanente discusión en el ámbito militar, porque contrario a lo que la mayoría piensa el grupo de enchufados militares es una minoría, mientras el grueso de los oficiales está tratando de hacer milagros. Incluso a nivel de los enchufados verdes hay preocupación porque el “dólar militar” o sea el Dipro de Bs. 10 está a punto de desaparecer. La situación es tan apremiante que Rafael Ramírez que en Nueva York no ve de cerca la crisis hizo sus críticas. Lo peor es que el gobierno de Maduro no tiene respuestas, ni las tendrá ante la gravedad de la situación. No tienen dinero. Literalmente el régimen está quebrado.
PDVSA. La postración de Petróleos de Venezuela es muy grave. Tan grave que está recurriendo a desviar una parte de la producción de las empresas mixtas para alimentar sus refinerías. La última decisión en ese tenor fue la orden de usar 45% de la producción de Petropiar en la cual el socio es la norteamericana Chevron. Ya lo había hecho con Petrocedeño, en sociedad con Statoil (Noruega) y Total (Francia). Eso es otro problema que se suma a las dificultades que atraviesa la relación con los socios en las mixtas, porque las empresas internacionales no han podido repatriar sus dividendos ya que el gobierno no les da los dólares ¿Por qué PDVSA desvía parte de la producción de las asociaciones estratégicas? Porque la producción propia está en el suelo y Petróleos de Venezuela por sí sola no tiene capacidad para cubrir las necesidades del consumo interno.
SE MUEVE (II). Ante la dramática situación del país, la permanencia de Maduro sería poco pertinente para los fines del oficialismo. Él lo sabe en medio de su alegórico comportamiento público de mandatario triunfante, vigoroso y con el control de la situación. Por eso si es inevitable su “sustitución” el querría poner a su sustituto. El no visualizaría esa sustitución para ahora, sino a través de las elecciones presidenciales. Por eso quiere tener la última palabra en esa decisión. Otros piensan en un evento sobrevenido que concrete esa “sustitución”. Cualquiera de las dos opciones está abierta, porque lo peor para ellos es que Maduro siga al mando. El nombre del candidato o candidata sigue siendo un tema de discrepancias. Si no puede ser Maduro ¿Quién entonces? He ahí el dilema. Y no tienen mucho tiempo para dilucidar el enredo. No es fácil dicha escogencia. No pueden hacer primarias porque implosionaría el oficialismo. Tampoco están dadas las condiciones para un consenso. Pero además con todo lo mal que está Maduro, es el oficialista que está mejor en las encuestas aunque eso suene y parezca paradójico. Pero la discusión existe. Por ahora pareciera que sólo en cada una de las tendencias y no hay una discusión colectiva. Tal como lo reveló el amigo Ángel Monagas en su columna “Caiga quien Caiga” extraordinaria de esta semana, comenzó el debate interno hacia quien debería ser el candidato presidencial. Al parecer en el “Madurismo” podrían estar seleccionando a Jorge Rodríguez como su opción para candidato presidencial, pero dudamos que el siquiatra tenga el apoyo de los más radicales y mucho menos de la cofradía militar. Si esa opción crece los “ultras” unidos con la cofradía verde podrían mover sus piezas para tratar de evitar esa designación. De las otras tendencias los aspirantes tienen enormes debilidades: Diosdado Cabello y Tarek El Aissami están seriamente cuestionados en el plano internacional. Mientras que de pronto la carta de María Gabriela Chávez podría tomar fuerza como mecanismo para rescatar el lazo emocional con la base política por haber sido ella la hija preferida de Chávez y pudiera ser vista como el renacimiento del legado del comandante. Con María Gabriela ocurre algo curioso y es su muy bajo perfil luego que fue enviada a Nueva York. No ejerce, por lo menos públicamente, su rol como parte del cuerpo de representantes ante la ONU. Pocos, por no decir nadie, la ve. Más allá de sus fotos en redes sociales con algunos miembros de la farándula, no hay nada de ella. No sería extraño que esté siendo sometida a un intenso proceso de marketing político para perfilar su candidatura y que aparezca en el momento adecuado. En el marco de la discusión sobre la candidatura presidencial, hay un serio problema y es el avance arrollador de la crisis. Por eso no se debe descartar una operación “tipo Mugabe” que concrete la “sustitución” buscando un relevo en la conducción del proceso revolucionario y un refrescamiento del gobierno ¿Cuándo podría ser esa operación? Difícil de saber, pero la lógica indica que no debe ser antes de las elecciones del 10D, sino posterior a la selección de los alcaldes ¿Por qué? Para no perturbar los comicios y que la base de burgomaestres al servicio del PSUV sea mayor que la actual ¿Pero luego entramos en la Navidad y estos hechos son poco frecuentes en estas fechas, sobre todo en Venezuela? Sí, pero recordemos que lo que ocurre en nuestro país es inédito, porque no hay un punto de comparación parecido. Navidad es una época de tradicional desconexión del ciudadano con la política y los problemas cotidianos. Eso en una situación normal y no estamos en ese nivel en la Venezuela actual. De pronto es la fecha adecuada para evitar manifestaciones de calle y tomar el control sin disparar una bala y sin tanto alboroto. Tampoco sería una misión de gran envergadura, porque recordemos que todo el gobierno está militarizado. El otro problema del oficialismo son los “ajustes de cuentas” entre los rivales internos.
PLAN. Ante las dimensiones de la crisis que afecta al Zulia quien pretenda llegar a la Gobernación debe tener un plan construido sobre la base de las prioridades. Eso se percibe en la campaña de Manuel Rosales quien está haciendo ofertas en aspectos puntuales, pero principalmente en el combate del hambre que azota a una parte importante de la población del estado. La recuperación del Programa Alimentario Escolar es una de esas prioridades, porque en la gestión de Pancho desmejoró y al final terminó entregando esa responsabilidad al gobierno nacional y la abandonaron. Rosales sabe muy bien la importancia de la alimentación de los escolares, porque en sus dos gestiones hizo mucho hincapié en entregar un menú oportuno y balanceado. Los comedores escolares son parte de las soluciones de fondo para dos problemas: el hambre y la deserción escolar. Mientras el otro ofrece espejitos, humo y la continuidad del desastre de la gestión de Maduro, Manuel Rosales ofrece una gestión que estará dedicada a la solución de los problemas de la población. Incluso la campaña antes de iniciarse formalmente ya estaba dando resultados positivos, porque la intención de votar de los ciudadanos se incrementó y según las encuestadoras Ivad e Index report, ya Rosales está adelante en la lucha por la Gobernación del Zulia.
DICOM. Luego de más de dos meses de haberse realizado la subasta número 15 del Dicom, el gobierno anuncia que fue anulada tal acción y alega que a raíz de las sanciones internacionales es imposible cumplir con esa asignación de dólares. Las sanciones no impiden ese tipo de operaciones que en nada tienen que ver con endeudamiento, sino con la liquidación de las divisas que requiere la economía. La verdad se inclina más hacia la sequía de dólares que afecta a las finanzas públicas. Le dieron largas al asunto pero al final nunca tuvieron el dinero. Esa es una mala señal de la caótica situación del gobierno. Pero además no es la primera vez que incumplen con las liquidaciones, porque en anteriores subastas también quedaron mal con algunos beneficiados. El Dicom, según algunos reales especialistas, terminó siendo un invento para proceder con una mega devaluación del bolívar a través de la excusa del mercado. Nunca hubo la intención, ni el dinero de liquidar los dólares que requiere una economía altamente dependiente de las importaciones. El desastre es muy grande.
SE MUEVE (yIII). Los “ajustes de cuentas” internos en el oficialismo no son nada nuevo, sólo que el momento del país los hace muy resaltantes. El más llamativo en la actualidad tiene que ver con las acciones emprendidas contra el ex Zar de la Energía en Venezuela, Rafael Ramírez. El caso RR tampoco es nuevo porque desde su intempestiva salida de la Vicepresidencia del área económica se viene rumorando que está en problemas con Maduro y otros de los líderes de las tendencias. Pero ahora el asunto tomó mayor fuerza a raíz de la detención en España de cuatro ex gerentes de PDVSA, entre los cuales destacan Nervis Villalobos y Rafael Reiter. Todo indica que el gobierno de los Estados Unidos estrecha el cerco en torno a Ramírez, porque todos los caminos de las investigaciones conducen a él. Ese peligro ha generado versiones que indican que RR podría convertirse en un “patriota cooperante” para los gringos, lo que sería muy útil porque él tiene la información que permitiría terminar de armar el rompecabezas de la corrupción y otras fechorías de los líderes del proceso. Esta presunción creció a partir de un artículo de Rafael Ramírez publicado en Aporrea, en el cual hace críticas duras contra la conducción económica de Maduro, lo que generó reacciones en su contra. Casualmente luego de sus cuestionamientos, sale el fiscal de la ANC, Tarek William Saab, anunciando la detención de ex gerentes de Citgo por corrupción. Ahora es cuando de pronto el régimen se da cuenta de las fechorías que se han cometido en Citgo ¿Será una maniobra contra Ramírez? Todo es posible en revolución. Ramírez, como pocos, tiene la llave de la caja de Pandora que esconde grandes secretos del oficialismo.
LEDEZMA. Muchas especulaciones ha generado el “peliculezco” escape de Antonio Ledezma. Por supuesto que alegra que un preso político logre recuperar la libertad, pero que además éste quede en una buena posición para liderar la disidencia en el exterior, que podría ser vital para aumentar la presión internacional que ayude a encontrar salidas al conflicto. Pero la huida de Ledezma no sólo resalta por eso, sino por todo lo que debió ocurrir para que se lograra su escape. Hubo una enorme coordinación entre tres países ¿Quién lo ayudo? ¿Hubo coordinación? ¿Por qué tomó la ruta más larga y riesgosa? Esas y muchas más preguntas siguen sin respuesta y lo analizamos esta semana en VyR (LEA: http://verdadesyrumores.com/analisis-las-lecturas-del-peliculezco-escape-de-antonio-ledezma/).
SUMANDO. La campaña de Carlos Alaimo a la Alcaldía de Maracaibo sigue tomando cuerpo a través de los respaldos que sigue recibiendo. Uno de los últimos y además muy interesante es el de la dirigencia de la Universidad del Zulia a través de la Federación de Centros Universitarios (FCU). A los estudiantes hay que agregar a dirigentes sindicales, vecinales y hasta religiosos que se sienten atraídos por la propuesta de cambio y construcción de ciudadanía. Alaimo presentó además su plan que contiene 25 líneas estratégicas para la recuperación de Maracaibo. El médico y empresario continúa con su esfuerzo de dar a conocer sus ideas y de promover el voto en la tarjeta del PIZ.
CONTACTO. En tiempos de limitaciones mediáticas por las presiones del gobierno, la mejor forma para hacer campaña y llegar a tocar a los vecinos es el contacto directo. Esta premisa la está cumpliendo el candidato de la Unidad en San Francisco, Gustavo Fernández, quien todos los días recorre las comunidades llevando su mensaje de cambio y de rescate de un municipio que ha sufrido la calamidad de un gobierno malo. Malo porque no atendió las necesidades de las comunidades y se enfocó parcialmente en su vitrina de la 40 y La Coromoto. Pero además porque pretendió gobernar sobre la base del terror. Fernández representa un cambio radical porque a través del consenso buscará resolver los problemas de los vecinos, que de paso él conoce muy bien porque toda su vida ha vivido en San Francisco. La respuesta de los electores ha sido positiva porque el entusiasmo por votar ha ido creciendo en la medida que la gente percibe que habrá una transformación de la Alcaldía y del estilo de gobernar. En San Francisco quieren liberarse.
REFLEXIÓN. Des de mi posición como ciudadano más que como periodista invito a la dirigencia de Primero Justicia, Acción Democrática y Voluntad Popular a reflexionar sobre lo que debería ser un cambio en su conducta hacia la elección del 10D. Si públicamente no pueden retractarse y llamar a votar a la ciudadanía, por lo menos deberían liberar a su dirigencia para que se sume a la campaña electoral y participe no sólo animando al pueblo para que sufrague, sino que además sea parte de la estructura de defensa del voto. Tal como le he dicho a los amigos que forman parte de esas organizaciones: es un error promover la abstención ahora y pretender que el pueblo se reanimará para las presidenciales. Aspiro que en un momento de sensatez esos partidos promuevan el voto. Si no lo hacen y el gobierno arrasa con todas o casi todas las alcaldías, luego se van a arrepentir de las consecuencias. Aparten sus diferencias con quienes decidieron participar y llamen a votar.
ALCALDÍA. Juan Carlos Fernández añadió el muy importante respaldo del partido Avanzada Progresista a su campaña electoral hacia la Alcaldía de Maracaibo. Esta es una campaña que se ha visto favorecida por el nivel de conocimiento que sobre Juan Carlos tienen los electores de Maracaibo, gracias a su programa de TV. El colega está escuchando los planteamientos de los vecinos en sus visitas diarias a las comunidades, pero además tiene una visión muy clara de cómo atender las dificultades en el marco de los problemas presupuestarios de la municipalidad marabina.
¿Y EL GENERAL? Me llama la atención el bajo perfil que ha tomado en los últimos días el general Miguel Rodríguez Torres ¿En qué andará el oficial retirado? Este es un militar al que hay que prestar más atención cuando no aparece, que cuando aparece.
PERIJÁ. Estas elecciones por las particulares circunstancias que la han rodeado, han servido para que muchas figuras políticas que por años han estado en la batalla, tengan ahora su mayor oportunidad. Un caso interesante es el de Paola Sánchez quien es la candidata de la oposición en el municipio Rosario de Perijá. Es una dirigente del partido Un Nuevo Tiempo con una larga trayectoria de lucha por las soluciones a los problemas de los vecinos. Fue presidenta del Concejo Municipal y ahora presenta una importante oferta electoral de rescate de un municipio que fue arrasado por una nefasta gestión del Alcalde “Madurista”. Sánchez ha hecho una intensa campaña de contacto directo con los vecinos, ante la ostentosa campaña del “madurista” que usa los recursos del municipio, la Gobernación y del gobierno nacional.
PREGUNTA. Ante el desarrollo de la campaña de Omar Prieto de repente me surgió una pregunta ¿Cuándo viene Maduro a levantarle la mano a su candidato en el Zulia?
LEJOS, MUY LEJOS. Así se observa la presencia de Pancho en la campaña de Omar Prieto. No está ni remotamente cerca de incorporarse. Sus diferencias con Prieto son irreconciliables y creo que no piensa hacer nada para que éste gane. Eso trae otros problemas colaterales porque Pancho tampoco aparece para ayudar a la mayoría de los candidatos a alcaldes, sobre todo al muy gris Willy Casanova en Maracaibo.
SANIPEZ. Mucho malestar y preocupación hay entre los integrantes de la Policía del Zulia por el deterioro en el servicio que presta Sanipez. No hay insumos. Hace pocos días murió un anciano porque no había lo necesario para atenderlo y sus familiares encontraron lo requerido demasiado tarde. Si eso le pasó a un ciudadano común, los policías se preguntan qué les ocurrirá a ellos y sus familiares cuando necesiten una atención urgente de salud.
Darwin Chávez|@darwinch857|[email protected]