El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ejercerá un mayor control sobre los contratos petroleros del país, en momentos de una purga de funcionarios y exejecutivos del sector tras escándalos de corrupción, reseñó Reuters.
Una ofensiva contra presuntos hechos irregulares en la industria petrolera ha llevado a la detención de unos 65 exejecutivos de alto nivel, entre ellos el exministro de Petróleo Eulogio Del Pino y el expresidente de Pdvsa Nelson Martínez.
“Aquí no van a venir más contratos avalados por (la) junta directiva para seguir saqueando, como lo han hecho en algunas instancias, la industria petrolera que es del pueblo”, dijo el presidente de Pdvsa, Manuel Quevedo, en un contacto con el programa dominical de Maduro.
El funcionario dijo que Pdvsa que se convirtió en un “enjambre” jurídico de 262 empresas que diluyó el proceso de seguimiento y control.
“A partir de mañana es la validación, todos los contratos (…) pasan a la revisión siguiendo sus instrucciones, bajo su liderazgo”, dijo Quevedo desde el Centro de Refinación Paraguaná, el mayor de Venezuela, en una comunicación con Maduro transmitida por televisión.
Quevedo agregó que también se revisarán los cargos dentro de Pdvsa desde el lunes.
No hubo más detalles disponibles de inmediato. Pdvsa no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios de Reuters.
Quevedo, un mayor general de la Guardia Nacional, asumió recientemente la conducción de Pdvsa y del Ministerio de Petróleo, una designación que fue vista como el inicio de una mayor influencia de los militares en la principal industria del país.
El jefe de la estatal dijo que se reunió con el exministro y también expresidente de la petrolera Alí Rodríguez, designado recientemente por Maduro como “presidente honorario” de Pdvsa, un nuevo nombramiento con el que busca levantar una producción que está por debajo de los 2 millones de barriles de petróleo por día (bpd), su nivel más bajo en casi 30 años.
Rodríguez ocupó la presidencia de Pdvsa y la secretaría general de la OPEP durante el gobierno del fallecido Hugo Chávez. El mandatario venezolano no explicó si Rodríguez continuará como embajador de Venezuela en Cuba.
Arte, vino y Ajedrez
El mandatario venezolano se refirió el domingo a la detención de Diego Salazar, un pariente cercano del exministro y expresidente de Pdvsa, Rafael Ramírez. Salazar fue arrestado por una investigación de lavado de dinero que involucra a Andorra.
Durante su programa de televisión del domingo, Maduro mostró un cuadro del pintor venezolano Armando Reverón y fotos de artículos de lujo, incluidas botellas de una supuesta bodega de 300.000 euros y un juego de ajedrez de oro, que dijo pertenecía a Salazar.
“¡Ladrones!” dijo Maduro, golpeando su puño sobre la mesa, durante la transmisión de casi cinco horas. “Que se le expropien todos sus bienes”, agregó.
Reuters no pudo confirmar las acusaciones de Maduro ni ponerse en contacto con un representante de Salazar.
A Salazar, pariente de Ramírez, se le imputarán los delitos de legitimación de capitales y asociación para delinquir.
El arresto de Salazar ocurre después de que Ramírez, que fue designado como embajador de Venezuela ante Naciones Unidas, escribió unos artículos de opinión cuestionando el declive en la producción de Pdvsa y el manejo del Gobierno de la crisis económica.
Según personas familiarizadas con el asunto, Maduro despidió a Ramírez la semana pasada y lo convocó de regreso a Caracas. El despido aún no ha sido confirmado por el Gobierno.