El presidente del Comité Olímpico Británico (BOA, por sus siglas en inglés), Sir Hugh Robertson, celebró este miércoles la decisión del Comité Olímpico Internacional (COI) de vetar a Rusia en los Juegos Olímpicos de invierno de PyeongChang 2018.
EFE
“No podemos estar contentos con lo que hemos conocido en la Comisión del COI. Sin embargo, creo que el COI ha tomado la decisión acertada”, explicó Robertson a través de un escueto comunicado.
“Creemos que estamos en un momento crucial en la lucha contra el dopaje, especialmente cuando éste es sistemático y está extendido; y debemos reconocer el papel que están desempeñando tanto el COI como la Agencia Mundial Antidopaje (WADA) para devolver la integridad al deporte olímpico”, prosiguió el presidente del BOA.
El COI suspendió el martes al Comité Olímpico Ruso por “dopaje de Estado” y estableció que los atletas de ese país sólo podrán competir -en el caso de que finalmente participen- bajo la bandera olímpica como “atletas neutrales”.
La ejecutiva del COI tomó esta decisión durante una reunión en Suiza, en la que analizaron el “Informe Schmid”, que confirmó la existencia de una trama organizada de dopaje durante años en Rusia.
Esta decisión impedirá a Rusia estar en los Juegos Olímpicos de PyeongChang, pero no a sus deportistas, que podrán acudir a Corea del Sur si pueden demostrar su limpieza en la competición y logran las mínimas de cada disciplina.
“Creemos que esta prohibición es más que acertada, sobre todo después de conocer los diferentes informes comisionados por el COI. Somos optimistas y esperamos que la decisión mande un mensaje claro tanto a los atletas como a los dirigentes que han hecho trampas”, expresó, por su parte, Ben Hawes, presidente de la Comisión de Atletas del Comité Olímpico Británico.
“No obstante, seguimos decepcionados por esos atletas a los que les impidieron ganar una medalla y vivir momentos inolvidables en Sochi 2014 y en otros Juegos Olímpicos”, apuntó Hawes.