Las colas por combustible disminuyen en las estaciones de servicio de Maracaibo. El suministro se estabiliza bajo la supervisión de la Guardia Nacional (GN). Luego de tres días sin recibir despacho (sábado, domingo y lunes), trabajadores de las gasolineras aseguraron que durante este martes, miércoles y jueves, reciben el despacho diario normal, reseñó La Verdad.
“Como que ya están llegando los buques. No nos dan más explicaciones”, expuso uno de los bomberos en una estación.
En la entidad zuliana, la problemática de abastecimiento se generó tras el retraso de los busques en la Refinería Bajo Grande, según ratificaron fuentes a La Verdad.
PDVSA reconoció el miércoles que había una falla no solo en Zulia, sino también en Barinas y Táchira. A través del Twitter únicamente expresaron que “debido a las medidas de bloqueo internacional contra Venezuela, se ha retrasado el despacho de combustible en parte del país”. Destacaron que se normalizaría en las próximas horas, lo que efectivamente, se evidenció durante la mañana de ayer.
“No tuve que recorrer mucho buscando gasolina. No tengo mucho rato y ya voy a llenar”, refirió Carlos López en la E/S El Carmen, situada en la avenida Delicias de Maracaibo, donde destacó la presencia de la GN. “Estamos verificando para evitar la venta ilegal. Esa es la orden”, dijo un guardia.
Durante un recorrido, se constató que aún persisten las colas, pero más cortas. La mejora parece ser paulatina. Algunas bombas estaban cerradas durante la mañana de este jueves, como fue el caso de la ubicada en la avenida Falcón. “Se nos acabó como a las 8.00 de la mañana. Ya es mediodía y estamos esperando a que llegue la gandola. Supuestamente viene en la tarde”, afirmó uno de los trabajadores.
El despacho normal en una gasolinera es de una gandola diaria de 38 mil litros, pero hay irregularidades por el “cierre técnico de las refinerías”, donde apenas reciben entre 10 mil y 20 mil barriles de combustibles al día, esto según apuntó a este medio Iván Freites, dirigente sindical.
El Centro de Refinación de Paraguaná que surte a Bajo Grande está en niveles “graves” y la situación podría empeorar, advirtió el sindicalista.