Irán violó un embargo de armas de la ONU impuesto a Yemen al no impedir que los rebeldes hutíes obtuvieran drones y misiles balísticos que fueron lanzados contra Arabia Saudita, según un informe de Naciones Unidas al que tuvo acceso la AFP el viernes, reseñó AFP.
Estas conclusiones pueden desencadenar que Washington y Riad refuercen sus acusaciones de que Teherán ha suministrado arsenal a los hutíes en su guerra contra la coalición liderada por Arabia Saudita.
“El panel identificó partes de misiles, equipamiento militar y dispositivos militares aéreos no tripulados de origen iraní, que fueron introducidos a Yemen tras el embargo de armas”, señala el documento presentado el martes al Consejo de Seguridad.
“Como consecuencia, el panel halló que la República Islámica de Irán no cumple el párrafo 14 de la resolución 2216” del Consejo de Seguridad, que impuso un embargo a la venta de armas a Yemen en 2015, detalló el informe.
Irán ha negado reiteradamente haber armado a los hutíes y en diciembre de 2017 acusó a la embajadora estadounidense ante la ONU, Nikky Haley, de haber “fabricado” pruebas que apuntaron a que un misil lanzado contra el aeropuerto de Riad el 4 de noviembre fue hecho en Irán.
La diplomática estadounidense aseguró en diciembre al Consejo de Seguridad que presionará para tomar acciones contra Teherán por suministrar misiles disparados contra su aliado, pero Rusia ya adelantó que no respaldará sus planes.
Aunque los expertos de la ONU aseguraron que el misil era iraní, no pudieron identificar quién lo fabricó y subrayaron que Teherán no facilitó información requerida por el panel.
Los especialistas viajaron a Arabia Saudita en noviembre y diciembre del año pasado para analizar los restos de los misiles lanzados por los hutíes en mayo, julio, noviembre y diciembre.
Descubrieron que las características de diseño de los restos de los misiles eran “consistentes con las del misil Qiam-1 diseñado y fabricado por Irán” y “casi con certeza producidas por el mismo fabricante”.
Los drones eran “prácticamente idénticos en diseño” a los de un UAV fabricado en Irán por la Iranian Aircraft Manufacturing Industries (Hesa), según el informe.
La situación de Yemen, uno de los países más pobres del mundo, se agravó desde que la coalición liderada por Riad intervino en marzo de 2015 para apoyar al gobierno.
Más de 8.750 personas han muerto en la guerra y el país enfrenta su peor crisis humanitaria, según la ONU.
Los expertos criticaron tanto a la coalición por matar civiles con ataques aéreos así como a las fuerzas hutíes por las incursiones armadas que han afectado de manera abrumadora a la población.
“El panel no ha registrado ninguna evidencia que sugiera que se tomaron medidas apropiadas de ningún lado para mitigar el impacto devastador de estos ataques sobre la población civil”, se indicó en el informe.
“Después de casi tres años de conflicto, Yemen como estado casi ha dejado de existir”, sostuvo.