La película Muerte Suspendida, estrenada en 2015, le presentó al país al inspector del Cicpc y actor Óscar Pérez. Con él, un grupo de funcionarios de ese cuerpo policial protagonizaron las acciones vistas en cámara, según publica talcualdigital.com.
El hombre que protagonizó un asalto al Tribunal Supremo de Justicia y varias operaciones en destacamentos policiales para apropiarse de armamentos, se convirtió en el “más buscado”, con carteles colgados en los postes, inclusive.
Hasta ahora era el único con rostro, pero el Gobierno estuvo “peinando” toda posibilidad. No solamente detuvo al “mejor amigo” de Pérez, como se informó en diciembre, sino que en unas oficinas del Cicpc en Caracas se mantienen detenidos los funcionarios que participaron con él en la película Muerte Suspendida, buscando el mayor realismo de las mismas. ¿Delito por asociación?
Los hombres, suspendidos de sus funciones y privados de libertad, están “entre amigos” pues todos los funcionarios se conocen. En diciembre llegaron a compartir alguna hallaca. Pero aún así se trata de una detención irregular: no están en un centro de reclusión y, nos cuentan, tampoco están procesados por tribunal alguno ni especificados qué delitos se les imputa. Simplemente están presos por haber compartido con Óscar Pérez las escenas de acción de una película de ficción.
