La antigua cúpula de la petrolera estatal venezolana PDVSA (Petróleos de Venezuela) está ahora bajo la lupa de la Justicia española. La Audiencia Nacional investiga una querella presentada por la actual dirección de la sociedad contra el que fuera su presidente en la época de Hugo Chávez, Rafael Ramírez, y otros ex directivos por un delito de blanqueo de capitales.
Reseña el diario El Mundo de España que la denuncia, presentada a mediados de 2017, advierte presuntas irregularidades en la administración de los fondos públicos manejados por esta empresa, así como transferencias de dinero realizadas a España por los implicados, algunas de ellas procedentes de Estados Unidos, según confirmaron fuentes jurídicas.
El procedimiento, que se encuentra bajo secreto de sumario, está en manos de la juez instructora Carmen Lamela.
Precisamente, el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, anunció hace apenas dos días su intención de solicitar una orden de busca y captura contra Rafael Ramírez por presuntos delitos de blanqueo.
Dicho esto, conviene advertir de que hay una guerra abierta entre el ex presidente de PDVSA -ministro del Poder Popular de Petróleo y Minería entre 2002 y 2014 y embajador de Venezuela ante la Organización de Naciones Unidas entre 2014 y 2017- y el presidente venezolano, Nicolás Maduro, a quien Ramírez retó a elecciones primarias dentro del chavismo para optar a la candidatura al Gobierno de Venezuela en los próximos comicios.
La investigación abierta en la Audiencia Nacional implica también al que fuera presidente de Electricidad de Caracas -filial de PDVSA- en la época de Chávez, Javier Alvarado Ochoa, persona considerada del entorno más próximo a Ramírez, y a Rafael Reiter Muñoz, antiguo director de Seguridad y Prevención de Pérdidas de la petrolera.
Tanto Alvarado como Reiter tienen vínculos empresariales con España. El primero fue administrador único de una sociedad de promoción inmobiliaria hasta el año pasado. Se trata de Catalufa Inversiones Inmobiliarias, registrada en Madrid en septiembre de 2014 y extinguida en enero de 2017, según consta en el Registro Mercantil.
En cuanto a Reiter es administrador único de Inversiones Vasamer, una empresa registrada bajo la actividad económica de platos y comidas preparadas, fundada en agosto de 2017 y domiciliada en San Cugat del Vallés (Barcelona), según datos que obran en el Registro Mercantil.Reiter está implicado en un procedimiento de extradición abierto también en la Audiencia Nacional a petición del Departamento de Justicia estadounidense por su presunta participación en una trama de sobornos en torno a la oficina de compras de PDVSA en Estados Unidos.
En esta causa está investigado también el que fuera viceministro de Energía Eléctrica entre 2001 y 2006, Nervis Villalobos, implicado además en otros dos casos de blanqueo. Uno, en España -caso Banco Madrid-, y otro, en Portugal, caso Banco Espirito Santo.
Tras la orden de arresto emitida por Estados Unidos, Reiter fue detenido en Madrid el pasado mes de octubre y se encuentra en prisión preventiva junto con Villalobos y Luis Carlos León Pérez, ex director de Finanzas de Electricidad de Caracas. El otro detenido fue César Rincón Godoy, ex gerente de Bariven, filial de PDVSA, sobre el que España aprobó su extradición el pasado 12 de enero.Además de estos procedimientos, Alvarado y Villalobos también están imputados en un caso de cohecho internacional y blanqueo vinculado a una trama de sobornos en torno al grupo asturiano Duro Felguera.
La Asamblea Nacional venezolana, a través de la Comisión Permanente de Contraloría, ya inició una investigación contra Ramírez en abril de 2016 por presuntos desvíos de dinero público a la Banca Privada de Andorra (BPA), así como a la compra de productos financieros en Banco Espirito Santo.