Argentina amaneció este lunes entre la conmoción y la rabia tras conocerse que Camila Borda, una niña de 11 años a la que hallaron muerta este domingo en la provincia de Buenos Aires, fue violada y asesinada presuntamente por un hombre de 40 años que la interceptó mientras iba al supermercado.
La niña se encontraba atada, con la cabeza tapada y sin vida, en la bañera de la casa en la que estaba el acusado cuando la Policía de la ciudad de Junín halló su cuerpo, casi cuatro horas después de que su madre denunciara su desaparición, explicó a los medios el fiscal del caso, Sergio Terrón.
Asimismo, reveló ante los medios que Carlos Varela, que ha sido detenido, habría abusado sexualmente de la niña y la habría asfixiado con un cable.
El fiscal aseguró que en su opinión no hay dudas sobre la culpabilidad de Varela, ya que encontraron la bicicleta en la que iba la niña en su casa, él intentó evitar que la policía encontrara el cadáver y vieron en su cuerpo heridas defensivas que presumiblemente se las habría ocasionado la víctima.
Por otra parte, Terrón aseguró que todavía no constan antecedentes penales de este hombre.
Una vez concluyan las investigaciones y avance este “aberrante” caso de “homicidio agravado”, pedirán “reclusión o prisión perpetua”, continuó el fiscal.
Tras el suceso, familiares y vecinos de la niña marcharon anoche para pedir justicia en una manifestación que acabó con dos móviles policiales incendiados, varios heridos y algunos detenidos.
Desde que comenzó 2018, los medios argentinos han registrado al menos otros 15 feminicidios en Argentina.
EFE