Como una violación flagrante a los derechos humanos de los privados de libertad y de sus familiares, catalogó Ramón Flores, diputado a la Asamblea Nacional por Voluntad Popular y presidente de la Federación Interamericana de Abogados (FIA), Capítulo Venezuela, la muerte de casi un centenar de personas en el incendio producido en la Comandancia de PoliCarabobo, al tiempo que denunció que el silencio oficial, es clara evidencia de la ineptitud gubernamental, el no cumplimiento de los tratados internacionales, y lo que es peor, no les importa la vida de los venezolanos.
Nota de Prensa
Mientras la Organización de las Naciones Unidas se solidarizó con esta tragedia que enluta al pueblo venezolano, no hemos recibido el parte oficial por parte de los voceros del Ministerio de Asuntos Penitenciarios, de Interior y Justicia, o de la Vicepresidencia de la República. Lo ocurrido en Carabobo confirma además, la crónica de una tragedia anunciada, tomando en cuenta que el hacinamiento penitenciario supera el 450%, destacó el dirigente activo de los derechos humanos.
En este orden de ideas recalcó que las policías estadales ni municipales, no están aptas para atender la integridad de los detenidos en los calabozos, porque a su juicio, son centros de reclusión de paso, pero debido al retardo procesal y a la ineficiencia del ministerio de Asuntos Penitenciarios, los reos duermen hasta parados debido al hacinamiento existente. Las cárceles se convirtieron en Universidades del delito, cuando su objetivo primario es, sancionar al transgresor, y luego reinsertarlo en la sociedad.
“Otra de las tragedias en el régimen penitenciario es que no hay clasificación del delito, y ya es común ver delincuentes de alta peligrosidad, con detenidos por robarse un racimo de plátanos, o por protestar por hambre. No obstante, ante una situación tan dantesca, es menester insistir en otorgarle a cada privado de libertad el lugar que le corresponde”, dijo.
Finalmente el diputado a la Asamblea Nacional, se solidarizó con los familiares de los fallecidos, heridos y con el pueblo de Carabobo, por esta tragedia que ha sacudido al país y a la comunidad internacional. “En este incendio no sólo fallecieron reos del recinto penitenciario, sino muchos de sus familiares que los visitaban, como es el caso de dos jóvenes que compartían con un jóven al que detuvieron de manera ilegal por protestar por falta de alimentos, acotó.