Pete Sessions, congresista republicano de Texas, visitó con tranquilidad Venezuela esta semana durante dos días y se reunió con el presidente Nicolás Maduro por invitación del gobierno venezolano en una misión de consolidación de la paz que ha despertado algunas sospechas en Washington, según reseñó AP este jueves.
“No está claro qué provocó la visita previamente no revelada del congresista de Dallas a la nación sudamericana políticamente turbulenta”, se lee en la publicación de la agencia.
Caroline Booth, vocera del congresista, dijo que estaba relacionada con el trabajo que Sessions ha realizado durante el 2017 como intermediario para resolver los problemas en Venezuela, pero se negó a dar más detalles.
Booth señaló que, como presidenta del poderoso Comité de Reglas de la Cámara, trabaja de forma rutinaria para garantizar que los países cumplan con los estándares internacionales y el estado de derecho.
El viaje se produjo a propósito de las presiones del gobierno de Maduro para evitar que la administración Trump imponga sanciones petroleras.
Un funcionario de los EEUU Dijo que el viaje privado no fue financiado por los contribuyentes y que Sessions recibió una carta de invitación del gobierno venezolano y se reunió con Maduro.
Texas es además el hogar de Citgo, una subsidiaria de Pdvsa. En 2017, varios de los ejecutivos de la compañía, incluidos cinco que tienen pasaportes de EEUU, fueron arrestados por las autoridades venezolanas en una investigación por corrupción que los críticos dicen que tiene motivaciones políticas.
Información de AP / Traducción al español por LaPatilla.com