ALTO
SILENCIO ANTE LA MUERTE:
El enfrentamiento “más sangriento” de los últimos años en la frontera palestina de Gaza con Israel produjo, hasta el último informe conocido, un total de 17 fallecidos la semana pasada. A pesar de la compleja sensibilidad política que viven esos dos pueblos se generó un gran despliegue no solo en los medios de ambos bandos en conflicto, sino en los principales medios de comunicación del mundo. Mientras ello ocurría, aquí en Venezuela, en una dependencia de la Policía del Estado Carabobo mueren 68 venezolanos entre calcinados por un provocado incendio como abaleados por sus guardianes. A pesar de que en Venezuela, por ley, el Estado es el responsable de la vida de un detenido o preso, este hecho, dramático en sus causas y consecuencias, ha sido forzadamente invisibilizado” por los grandes medios informativos y las fuentes oficiales que para nada detallan sobre las causas, los responsables y los procedimientos para hacer justicia. Un nuevo caso en el cual el cerco rojo rojito a la libertad de información se expresa en pleno funcionamiento y de la manera más descarada.
El colmo es que el régimen chavista-madurista se inventó en el 2011 un ineficiente ministerio y una ministra del Poder Popular para el Servicio Penitenciario, quien en esta oportunidad lo único que dijo es que lo ocurrido no es de su competencia porque tan desgraciado e inhumano acontecimiento no ocurrió en una dependencia a su cargo. ¡Insólito! ¡Inmoral! Junto a ello, y aún más representativo de que vivimos en una transparente dictadura, es el simple anuncio de que se “abrirá una averiguación”. El Fiscal General, tras anunciarla, informó las detenciones de los jefes de esa dependencia donde las víctimas calcinadas tenían disparos y sus autopsias hechas a la velocidad del rayo. En 20 años han tenido todos los poderes del Estado, la mayor riqueza petrolera de la historia, han conformado el más grande gabinete de ministros en cada renglón (en números, no en conocimiento y por eso rotan de un despacho a otro), han manejado los órganos de justicia a su pleno capricho y ni siquiera han podido medio mejorar las condiciones de las cárceles venezolanas. Inventaron el eufemismo “privados de libertad” para identificar a los presos. ¿Se hará justicia? La mayoría de ellos estaban sin presentación ante los tribunales ni juicios abiertos. Llevados allí por la destrucción de las cárceles que sirvieron de negocio para los funcionarios construyendo nuevas instalaciones en las que todavía hoy están hacinados a nivel nacional. Ayer informaron de un contratista del MPPRIJP en 2008 que no terminó de entregar las obras carcelarias encargadas y -para sorpresa de todos- es hoy, en Europa, un gran coleccionista de los maestros Cruz Diez y Soto. Ya no caben los detenidos en las policías regionales (hay 30.000 y para cuidarlos se destina el 30% de los policías que debían estar patrullando.) y sus jefes recomiendan a los funcionarios dejarlos en libertad, aunque los agarren infraganti, pues no hay espacio ni alimentación posible. En cárceles hay 45.000.
Tenemos récord este año con mas de 200 fugas de presos a nivel nacional. En mi show de esta semana en el penalista Luis Izquiel desnuda la corrupción carcelaria. ¿Hecho en socialismo? Mejor decir “Destruido en socialismo robolucionario” …