El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, condenó este viernes el asesinato de los tres periodistas ecuatorianos que habían sido secuestrados a finales de marzo cerca de la frontera de Ecuador con su país y ofreció toda la colaboración de su país para capturar a los responsables, reseñó EFE.
Tras participar en una conferencia en la reunión de empresarios de la VIII Cumbre de las Américas, que se celebra en Lima, Santos atribuyó el crimen a bandas organizadas dedicadas al narcotráfico y descartó que los asesinos sean las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) porque afirmó que “estas dejaron de existir hace mucho tiempo”.
El mandatario colombiano se reunirá esta tarde en la capital peruana con la ministra ecuatoriana de Relaciones Exteriores, María Fernanda Espinosa, quien al igual que hizo ayer el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, podría acortar su viaje a Lima dados los acontecimientos, aseguraron fuentes oficiales a Efe.
Santos indicó que desconoce el lugar dónde fueron asesinados los periodistas porque la Cruz Roja todavía no conoce el paradero de los cadáveres.
Sin embargo, recordó que la muerte de los tres periodistas del diario El Comercio de Ecuador es atribuida por las autoridades ecuatorianas a un ciudadano de la misma nacionalidad que responde al pseudónimo de “Guacho”.
“Colaboraremos con Ecuador en todo lo que estime necesario para perseguir y capturar a los responsables”, comentó Santos, quien permanece en constante comunicación con Moreno.
El gobernante colombiano remarcó que ya comenzaron las operaciones en ambos lados de la frontera entre Ecuador y Colombia para hallar a los autores del crimen.
No obstante, Santos reconoció que las acciones en el lado colombiano se habían reducido en los últimos días “por razones humanitarias”, pero que se reanudarán “con toda intensidad” tras esta noticia.
“Al presidente Moreno le he dicho y reiterado que tiene todo el apoyo, solidaridad y colaboración para que los responsables de este crimen sean llevados a la justicia”, reiteró Santos.
El periodista Javier Ortega (36 años), el fotógrafo Paúl Rivas (45 años) y el conductor Efraín Segarra (60 años) fueron secuestrados en la zona de Mataje, en la provincia de Esmeraldas, frontera con Colombia cuando realizaban un reportaje sobre la creciente inseguridad en la zona desde enero.
Su secuestro y asesinato ha sido atribuido, y autoreclamado según comunicados que han llegado a medios colombianos y fundaciones ecuatorianas y están bajo investigación, al grupo “Oliver Sinisterra”, liderado por “Guacho”, un disidente de las Farc.
A las 10.50 hora local de hoy (15.50 GMT) venció el plazo dado anoche por el presidente de Ecuador para que los secuestradores del equipo periodístico dieran una prueba de vida de los cautivos.