En el caso del excomandante guerrillero Jesús Santrich, que lo tiene a punto de ser extraditado a Estados Unidos por su presunta intención de traficar con cocaína hacia ese país, está a punto de abrirse un nuevo capítulo judicial con la insistencia ante la Corte Suprema de Justicia de que debe recuperar su libertad por lo que su defensa considera fue una “captura ilegal”, publicó El Tiempo de Colombia.
En cuestión de horas, que en principio no serían más de 24, el abogado de Santrich, Gustavo Gallardo, radicará ante la Corte Suprema de Justicia un recurso de impugnación para que se revise la negativa del Tribunal Superior de Bogotá en torno a un habeas corpus con el que quería que su cliente quedara en libertad.
Gallardo le confirmó EL TIEMPO que esta impugnación busca ratificar que el caso del excomandante guerrillero y también congresista electo debió pasar primer por la Justicia Especial para la Paz (JEP). Además, añadió que insistirá en que en Colombia su cliente no tiene un proceso formal abierto y que, incluso, no se han dado a conocer oficialmente las pruebas que lo vincularían con la intención de enviar 10 toneladas de coca a Estados Unidos.
El abogado le reiteró a este diario que desde diciembre del año pasado Santrich suscribió su acta de compromiso ante la JEP, por medio de la cual su proceso pasaría a hacer parte de esta jurisdicción y es en ella donde se debería decidir si era o no viable su captura con fines de extradición.
Sin embargo, el Tribunal Superior de Bogotá ratificó que la Fiscalía cumplió con el ordenamiento legal al proceder con la orden de captura emitida por la Interpol y que, por lo tanto, debe permanecer tras las rejas. Estas dos posturas tendrán ahora que ser dirimidas por la Corte Suprema apenas Gallardo presente la impugnación.
Y, por otra parte, Santrich, además, comenzó a tomar distancia del sobrino de ‘Iván Márquez’, Marlon Marín Marín, quien también está preso por intentar traficar con cocaína hacia el exterior y, como lo informó este diario en su edición dominical, está involucrado en los intentos por desfalcar la denominada ‘chequera de la paz’.
Lo que se busca es ratificar que Marín Marín está siendo procesado por la justicia ordinaria, pero que Santrich debe estar en la órbita de la JEP por haberse acogido al proceso de paz entre las Farc y el Gobierno. También quiere tomar distancia, porque considera que su situación jurídica no está relacionada con el intento de descalabro de los recursos del posconflicto.
Siga leyendo en El Tiempo