La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) sacó hoy a 132 refugiados y solicitantes de asilo de Trípoli, reanudando así su programa de evacuaciones humanitarias en Libia que quedó temporalmente interrumpido a principios de marzo.
La agencia explicó en un comunicado que se trata de la primera evacuación que se ejecuta desde la suspensión de las operaciones, después que el Gobierno de Níger advirtiera de que las salidas futuras de reubicación en otros países no se ajustaban al ritmo de llegadas a su país.
El grupo de 132 refugiados y solicitantes de asilo voló de Trípoli a Niamey, la capital de Níger.
“Los refugiados detenidos en Libia viven en condiciones extremas que amenazan su vida y su bienestar”, dijo el enviado especial para la situación del Mediterráneo de ACNUR, Vincent Cochetel.
“Este programa trata salvar a los individuos más vulnerables de un daño mayor”, agregó.
El enviado especial recordó que el Gobierno de Níger ofreció “generosamente” un espacio adicional para 1.500 refugiados en el Centro de Tránsito que gestiona ACNUR en Niamey con el apoyo financiero de la Unión Europea.
Sin embargo, Cochetel sostuvo que es necesario “encontrar soluciones urgentes para la reubicación de estos refugiados en otros países”.
El vuelo que salió hoy de Trípoli era el segundo intento esta semana de evacuar el grupo de refugiados de Libia, después que el pasado martes el avión tuvo que regresar a tierra por problemas técnicos.
Los refugiados y solicitantes de asilo tuvieron que pasar otra noche en detención.
ACNUR planea otras evacuaciones que incluirán refugiados detenidos en distintos centros en Libia.
Estas iniciativas forman parte de una serie de medidas que ofrecen alternativas a los peligrosos viajes que emprenden los migrantes a través de las rutas del Mediterráneo. EFE