El máximo responsable de la Iglesia anglicana en Estados Unidos pronunciará la homilía en la boda del príncipe Enrique de Inglaterra y su prometida estadounidense, Meghan Markle, anunció este sábado el palacio de Kensington.
El obispo presidente Michael Bruce Curry, primado de la Iglesia episcopal de Estados Unidos, pronunciará la homilía durante la ceremonia en la capilla de San Jorge en el castillo de Windsor, al oeste de Londres, el 19 de mayo.
“El amor que unirá al príncipe Enrique y a Meghan Markle tiene su origen en Dios, y es la clave para la vida y la felicidad”, dijo Curry.
“Y por ello celebramos y rezamos por ellos hoy”.
El palacio de Kensington había anunciado anteriormente que David Conner, el deán de Windsor, oficiará la boda.
Justin Welby, el arzobispo de Canterbury, cabeza espiritual de la Iglesia de Inglaterra y líder de los 85 millones de anglicanos en el mundo, tomará los votos matrimoniales.
Curry se convirtió en noviembre de 2015 en el 27º obispo presidente y primado de la Iglesia episcopal. De 65 años y procedente de Chicago, es el primer afroamericano en ocupar ese puesto.
La Iglesia episcopal es miembro de la Comunión Anglicana, dirigida por Welby y que contaba con 1,9 millones de miembros bautizados en 2015.
En 2003 provocó una grieta en la Comunión cuando ordenó obispo al abiertamente homosexual Gene Robinson.
En 2012 se convirtió en el mayor grupo de fe en Estados Unidos en aprobar un rito provisional para bendecir las uniones del mismo sexo.
– Markle, bautizada –
Markle fue bautizada y confirmada por Welby en marzo antes de su matrimonio.
Se entiende que ha elegido unirse a la Iglesia de Inglaterra por respeto al papel que la reina Isabel II, abuela de Enrique, tiene como mandataria suprema de la iglesia madre de la Comunión Anglicana.
El padre de Markle es un episcopal, mientras que su madre pertenecía a otra confesión protestante.
Sin embargo, Markle asistió a una escuela católica romana privada para chicas en Los Angeles.
Enrique es el sexto en la línea de sucesión a la corona.
Los católicos están excluidos de la sucesión al trono, y el soberano debe estar en comunión con la Iglesia de Inglaterra, jurar preservarla y prometer defender la sucesión protestante.
Las personas que se casaban con católicos eran excluidas también del orden de sucesión antes de que una ley en 2013 entrara en vigor en los 16 reinos de la Commonwealth que tienen como jefa de Estado a la reina Isabel. AFP