Ramón Flores, diputado a la Asamblea Nacional por el partido Voluntad Popular, expresó que la siembra de delitos, la represión y la persecución de los parlamentarios Gilber Caro, Renzo Prieto y Wilmer Azuaje, es una política fascista del Estado, la cual condenó por ser violatoria de los derechos humanos y fundamentales contemplados en la Constitución y en los tratados internacionales de DDHH.
Nota de Prensa
En Venezuela no se respeta el derecho a la vida contemplado en nuestra carta magna, los tratados, convenios y pactos internacionales de derechos humanos, violando el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional. No obstante, cada día se agudiza la represión, el amedrentamiento y la siembra de delitos, y nuestros presos políticos continúan en los barrotes de las cárceles, incluso con boletas de excarcelación, denunció.
En este orden de ideas el defensor activo de los derechos humanos, dijo que Leopoldo López, el alcalde Daniel Ceballos, José Gregorio García, los diputados Gilber Caro, Renzo Prieto y Wilmer Azuaje; Freddy Guevara en la Embajada de Chile, los alcaldes en el exilio Wagner Jiménez, David Smolansky y otros tantos inocentes, continúan injustamente presos porque en Venezuela existe una criminalización de la disidencia, como parte de una política de Estado del terror, forajido que no respeta ningún convenio y que actúa al margen de la ley.
Exigimos la liberación inmediata de todos los presos políticos, incluyendo a los Policías Metropolitanos del 11A y militares como el General Vivas y los recientes encarcelados. Exhortamos a producir cambios inminentes en democracia, que regrese el Estado de Derecho, la separación de los poderes y la vigencia y respeto a la Constitución Nacional que hoy es letra muerta, sentenció.