El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, subrayó este jueves la experiencia de Colombia en la resolución de conflictos, que podría beneficiar a los aliados en Afganistán, tras recibir el mandatario colombiano, Juan Manuel Santos, en la sede de la Alianza.
“Colombia es el nuevo socio de la OTAN y nuestro primer socio de América Latina”, dijo Stoltenberg en una declaración ante la prensa con Santos, quien viajó a Bruselas para confirmar el estatuto de “socio global” que adquirió su país meses después de lograr la paz con la guerrilla FARC.
El jefe de la Alianza Atlántica y el mandatario colombiano acordaron centrar su cooperación bilateral en aspectos como el desminado, la ciberseguridad y el papel de las mujeres en las fuerzas armadas, entre otros ámbitos.
“Los aliados también podrían beneficiarse de la experiencia colombiana con respecto al proceso de paz y reconciliación en Afganistán”, apuntó Stoltenberg, quien destacó el “liderazgo” del colombiano para “transformar su país” y “garantizar la paz y la estabilidad”.
A su lado, Santos calificó de “enorme privilegio” que su país se convierta en el “primer país de América Latina” en lograr una mayor cooperación con la OTAN como “socio global”, estatuto que comparte con otros ocho países, entre ellos Afganistán, Japón, Australia, Nueva Zelanda o Irak.
“La OTAN se convierte en un socio estratégico para Colombia para continuar en la construcción de este país moderno, nuevo que queremos dejarle a las próximas generaciones”, subrayó el mandatario colombiano, diciendo que esta cooperación “ahorrará muchos recursos” a su país.
La colaboración con la OTAN permitirá a Colombia una “mayor capacidad” en el desminado, “mejores herramientas para enfrentar los desafíos de seguridad”, “más información para combatir el crimen organizado transnacional” y “mayor calidad” en formación y entrenamiento, detalló Santos.
Para el jefe de Estado colombiano, su país podrá aportar a la Alianza Atlántica experiencia en solución de conflictos, lucha contra el crimen organizado, lucha contra el narcotráfico, en migración irregular y en desastres naturales.
Antes de lograr el estatuto de “socio global”, la relación entre ambos vino precedida de años de cooperación e intercambio de información desde 2013. En 2015, Colombia aportó un buque a la operación contra la piratería de la OTAN en el Cuerno de África.
“Siempre respetaremos su autonomía e independencia”, concluyó el jefe de la OTAN. Esta cooperación de Colombia con la Alianza no implica su membresía, que en virtud del Tratado de Washington sólo está abierta a los países europeos, además de Estados Unidos y Canadá. AFP