El avión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llegó hoy poco antes de las 11.00 hora local a la base aérea de Bagotville, al norte de Quebec (Canadá), para participar hoy y mañana en la Cumbre del G7. EFE
Tras descender del “Air Force One”, Trump fue recibido por la embajadora de Estados Unidos en Canadá, Kelly Craft, para dirigirse a continuación al helicóptero que lo traslada al hotel de lujo Le Manoir Richelieu, en la localidad de La Malbaie, donde hoy se inicia la Cumbre del G7.
Trump, que expresó en las últimas horas su descontento por tener que acudir a la reunión de los países más industrializados del mundo, se encontrará en Le Manoir Richelieu con uno de los ambientes más hostiles al que ha tenido que enfrentarse un presidente estadounidense en una reunión del G7.
Poco antes de partir hacia Canadá, Trump solicitó el reingreso de Rusia en el G7, idea que fue inmediatamente rechazada en La Malbaie por el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk.
Trump también acusó a la Unión Europea (UE) y Canadá, sus dos principales aliados, de tratar injustamente a Estados Unidos en materia comercial.
Tanto los líderes europeos como el anfitrión de la Cumbre del G7, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, han anticipado que las conversaciones en La Malbaie con su socio estadounidense serán difíciles y “francas”.
Por su parte, la Casa Blanca anunció anoche que Trump abandonará mañana, sábado, la cumbre antes de que acabe para viajar directamente desde Canadá hacia Singapur, donde el día 12 de junio tiene previsto reunirse con el líder norcoreano, Kim Jong-Un.