La semana pasada, la Organización de Estados Americanos (OEA) se abstuvo de elegir a Nardi Suxo Iturry, exministra boliviana y aliada política de Evo Morales, para servir como juez en la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Previo a la votación del 6 de junio, Human Rights Foundation (HRF) envió cartas a todos los gobiernos democráticos de las Américas documentando el pésimo trabajo que Suxo ha demostrado en materia de derechos humanos. Como resultado, los miembros de la OEA se abstuvieron de elegir a Suxo, quien jugó un papel fundamental en la eliminación de la independencia del poder judicial en Bolivia y la persecución de los opositores políticos a Morales. Los estados miembros optaron por elegir a Humberto Sierra Porto de Colombia, Eduardo Ferrer Mac-Gregor de México y Ricardo Pérez Manrique de Uruguay.
Nota de Prensa
“La Corte Interamericana de Derechos Humanos es el órgano judicial más importante de la región cuya tarea es proteger los derechos fundamentales de las personas en el continente. Por lo tanto, es esencial que sus miembros estén verdaderamente comprometidos con la democracia y la libertad”, dijo Thor Halvorssen, presidente de HRF. “Una labor tan importante no puede estar en manos de un individuo que es leal a un régimen autoritario y que tiene varios casos por corrupción pendientes en su contra; además de haber apoyado la reelección inconstitucional de Morales. Estos fueron algunos de los motivos por los que HRF solicitó a los miembros de la OEA que se abstuvieran de votar por la Sra. Suxo, y los resultados del pasado miércoles deben considerarse como una victoria importante para la independencia de la corte”.
A principios de este mes, HRF envió cartas a cada estado miembro de la OEA, con excepción de Cuba, Bolivia, Venezuela y Nicaragua, los cuales no pueden ser considerados como democracias bajo los principios de la Carta Democrática Interamericana. En las cartas — firmadas por Garry Kasparov, secretario general, y Thor Halvorssen, presidente de HRF — HRF explicó el papel que desempeñó Suxo en la cooptación del poder judicial por parte del régimen de Morales. Así mismo, HRF describió cómo Suxo utilizó su cargo como representante de Bolivia ante las Naciones Unidas para votar consistentemente en contra de cualquier resolución que condenaría los crímenes de lesa humanidad cometidos por la dictadura de Bashar al-Assad en Siria.
HRF es una organización sin fines de lucro, independiente y apolítica, que promueve la defensa de los derechos humanos a escala mundial, con énfasis en sociedades cerradas.
Lea la carta de HRF a los miembros de la OEA aquí. Una versión en inglés está disponible aquí.
Ver comunicado en el sitio de HRF aquí.