El 20M como hecho político después de un mes no ha sido interpretado por el liderazgo democrático y es orillado por el bestiario militarista como Estado Cuartel, razón por la cual la ciudadanía está en el derecho de instrumentar como extrema expresión de resistencia civil la huelga general. Huelga general a la que casi se llega cuando un gobierno inepto, amedrentado e incapaz no ha podido definir una política pública que den respuesta al resultado del hecho político del 20M, que expresó de manera diáfana el rechazo al chavismo y postchavismo e igualmente al difuso, débil y descentrado liderazgo democrático.
Ese liderazgo político democrático menos ha podido hacer en el Ambiente Político Real que, entre eventos y actos, le falta capacidad para interpretar que el 20M el ciudadano rechazo al chavismo y postchavismo -Estado cuartel-, pero igual a los mercaderes y oportunistas que intentaron darle legitimidad a la tiranía castrochavista que hoy subyuga al venezolano paralizándole la actividad económica, el soporte social y su responsabilidad en las demandas previstas y pospuestas. La ciudadanía entonces hoy, después de un mes está impuesta a crecer en su Resistencia Civil mediante una huelga general. Huelga general que termine de paralizar a un régimen que se apartó de la razón, la Constitución y la libertad.
La ciudadanía tendrá que organizarse para que por la vía de la Huelga General se desplace al Estado cuartel y logre la transición política, es decir, creadas las condiciones necesarias y suficientes en el sistema político venezolano, se termine de detener al gobierno tiránico que solo sirve para que la falsa electoral muestre a una sociedad ahuecada, perseguida y controlada por un cuerpo armado que sirve de instrumento perverso al régimen. Huelga General que será expresión real y cierta en Venezuela al dejar inmóvil lo que ya casi no funciona, habida cuenta que no hay líderes, no hay transporte, no hay asistencia medica, no hay seguridad, no hay trabajo y sólo la Huelga General como resistencia civil será el vector político que nos asome a la transición.
Transición en la cual la ciudadanía organizada, amarrada a la resistencia civil podrá mostrar los nuevos operadores políticos regionales dispuestos a comprender el 20M pero además, a direccionar el grave sufrimiento y la necesidad de resolver las demandas que aquejan a un pueblo menesteroso. La menesterosidad en los hombres y mujeres taciturnos, tristes, adoloridos porque casi no pueden vivir, empresas menesterosas de transporte, empresas menesterosas de salud, empresas menesterosas de lo que sea, por cuanto al bestiario militarista cobarde y traidor se ha puesto de parte de un grupo retrogrado primitivo y mafioso que ha hecho de Venezuela un centro de explotación y de asalto para transformar a Venezuela en un país miserable.
La ciudadanía y la Huelga General al desplazar al Estado Cuartel se convertirán en el punto de transición que potencie la coordinación y acción de muchos otros ciudadanos que hoy lloran a sus hermanos que se fueron, que sufren por las universidades cerradas, que sufren por los hospitales inoperativos que están acompañados por una nostalgia y una tristeza total. Mientras… que un grupo de asaltantes bailan, se emborrachan y muestran una alegría perversa que se recordara por mucho tiempo en la historia de dominio –sumisión de quienes todavía en el siglo XXI creen que es factible el socialismo a juro. Quienes hoy aúpan al socialismo a juro y su Estado Cuartel todavía no ha entendido lo que significa el 20M y la ciudadanía.
La ciudadanía, es decir, esa masa de hombres y mujeres que rechazaron tanto al régimen autocrático militarista como a los mercenarios de la democracia, mediante la Huelga General construirán el hito para que frente y ante la incapacidad de un liderazgo aterrad , y sin propuesta comprenda que la ciudadanía entendida como fuerza direccionada democrática, va arquear el extraordinario hecho de resistencia civil del 20M con una Huelga General promisoria, que abrirá la compuerta a una Participación Política Contendiente que represente el ethos democrático del adormitado liderazgo escurridizo y cobarde, que todavía no entiende el 20M como resistencia civil.
La ciudadanía en el rol del liderazgo que se renovará mediante una masa de ciudadanos capaces de comprender el Ambiente Político Real será el gran actor de la Transición Política. Pero, además, de la urgencia de cambio a lo que está impuesto el país antes de llegar al caos. Caos que avizora una sociedad ahuecada, controlada y vigilada por el reducto de hombres armados que no fueron capaces de exponenciar la revuelta, pero menos de respetar la Constitución y expresar sus principios éticos y morales. La ciudadanía, esa que dictó clases el 20M, será partera mediante la Huelga General de un gran cambio, la transición política al convertirse en la ejecutora de una Huelga General que rememore el 20M como un acto de Resistencia Civil fundamentado en el contrato original y el inicio de la transición política.
Es original,
Dr. José Machillanda
Director de CEPPRO
@JMachillandaP