El presidente de Chile, Sebastián Piñera, firmó hoy un proyecto de ley de Transformación Digital que busca hacer obligatorio el soporte electrónico de los procedimientos administrativos y dar validez jurídica a los documentos digitalizados.
EFE
Además de suponer un ahorro de recursos, la iniciativa apunta “a terminar con la peregrinación del ciudadano de una institución pública a otra para obtener un beneficio”, dijo Piñera durante el acto de firma del proyecto.
Destacó que los objetivos de la modernización del Estado “son muy simples: hacer más fácil, más económica, más simple la relación entre el Estado y los ciudadanos, para los ciudadanos y para el Estado, y de esa forma ayudar a nuestros compatriotas a cumplir sus sueños, a resolver sus problemas, a desarrollar sus talentos y a aprovechar las oportunidades”.
“Queremos menos papeleo y más tiempo libre para los chilenos”, subrayó y se declaró convencido de que “estamos dando un paso más hacia una sociedad que pueda aspirar con legitimidad a dejar atrás 200 años de subdesarrollo, 200 años de pobreza, 200 años de burocracia”, puntualizó.
Según cálculos gubernamentales, en Chile se gastan anualmente 108 millones de dólares en papel de impresión, fotocopias, impresión de carpetas, archivadores, bodegaje de documentos y envío de cartas certificadas.
Asimismo, se estima que entre un 30 % y un 50 % del tiempo de trabajo de los funcionarios públicos se utiliza en gestión de papeles, buscarlos, clasificarlos, moverlos y gestionarlos.
Medido en remuneraciones, el costo de esto último es de 1.000 millones de dólares al año.
Los servicios públicos emiten unos 75 millones de certificados al año, de los que 70 millones se derivan de 15 certificados que, en un 30 %, se obtienen de forma presencial.
En la ceremonia, Piñera presentó además a los integrantes del “Consejo para la Modernización del Estado”, instancia que forma parte de sus compromisos electorales y cuya función será asesorar al presidente en asuntos relacionados con reformas del Estado, que en un plazo de cien días debe entregar un plan.
Al frente del Consejo, de doce integrantes, estará el excontralor general de la República, Ramiro Mendoza, y deberá aportar una visión de largo plazo en las reformas al Estado, una visión transversal, sentido de urgencia y continuidad al proceso de modernización, dijeron fuentes gubernamentales.
En el caso de Chile, “el Estado creado en siglo XIX, parchado (remendado) en el siglo XX, va a ser modernizado en el siglo XXI”, comentó Piñera, que añadió que es necesario pensar en “cómo podemos hacer que el Estado le simplifique y no le complique la vida a nuestros compatriotas”.
El mandatario advirtió a los integrantes de la instancia que “va a haber muchas dificultades en el camino”, porque “se cambiarán leyes, tecnología y también cambiará una “cultura”.
Entre los integrantes del Consejo hay representantes de diversas corrientes políticas, culturales, centros de estudio y universidades, como Evelyn Matthei, candidata presidencial de la derecha en 2013 y actual alcaldesa del municipio santiaguino de Providendencia.
También Javier Etcheverry, exministro del gobierno de centroizquierda de Ricardo Lagos (2000-2006), o Luis Larraín, director del Instituto Libertad y Desarrollo, vinculado al conservador partido Unión Demócrata Independiente (UDI).