La Fiscalía y la Policía Civil de Río de Janeiro arrestaron este viernes a 21 personas acusadas de tráfico de drogas en una operación conjunta en la Baixada Fluminense, una deprimida región en el área metropolitana de esta ciudad brasileña y una de las más castigadas por la violencia, según fuentes oficiales.
La “Operación Paraíso”, nombre que recibió la acción conjunta y en la que participaron 150 policías, tenía el objetivo de cumplir 30 órdenes de arresto preventivo contra sospechosos de asociación para el tráfico de drogas en la región de Campos Elíseos, Jardim Primavera y Saracuruna, en Duque de Caxias, uno de los municipios de la Baixada Fluminense.
La acción buscaba también aprehender a dos adolescentes, acusados de colaboración con la asociación criminal, que tiene conexión con criminales del Complejo da Penha, una región dominada por el narcotráfico en la zona norte de la ciudad.
A través de la escucha de llamadas telefónicas autorizadas por la justicia, las investigaciones concluyeron que este grupo criminal era liderado por Thiago Barbosa Conrado, conocido como “Thiaguinho” o “TH”, y por Welinton Oliveira Souza, conocido como “Cara de Cerdo”.
La Policía informó que el grupo también era responsable de numerosos robos en la región, que servían para financiar a los criminales.
La región objetivo de la operación, una zona deprimida cercana a la ciudad de Río, es azotada por la violencia con una mayor intensidad puesto que vive una intensa disputa entre narcotraficantes y milicianos, como son los grupos paramilitares integrados por policías y expolicías.
La creciente violencia en Río de Janeiro desde los Juegos Olímpicos de 2016 obligó al presidente de Brasil, Michael Temer, a decretar la inédita intervención militar en el área de seguridad de este estado brasileño, medida que cumplió cuatro meses la pasada semana.
La intervención entregó a los militares la tarea de acabar con la ola de violencia que afecta a ese estado desde hace meses y que el año pasado causó 6.731 muertes.
EFE