Maduro promete “justicia” contra promotores de la guerra económica que él mismo inventó

Maduro promete “justicia” contra promotores de la guerra económica que él mismo inventó

AFP PHOTO / Federico PARRA

 

 

El presidente venezolano, Nicolás Maduro, advirtió este jueves que someterá a la justicia a quienes promueven una supuesta “guerra económica” en el país petrolero, con hiperinflación y escasez de alimentos, medicinas y bienes básicos.





AFP

“Derrotaremos la guerra criminal y económica contra nuestro pueblo (…). Vamos a derrotar y someter con la ley en la mano a los que dirigen la guerra criminal contra el pueblo, lo juro”, expresó Maduro durante un desfile militar por los 207 años de la independencia de Venezuela.

Maduro culpó de esa agresión a la “oligarquía” y al “imperialismo”, como suele referirse a la oposición y a Estados Unidos.

“Que nadie se confunda, el pueblo tiene su esperanza y su rebeldía más viva que nunca en la batalla que está dando contra la guerra económica de la oligarquía y el imperialismo”, sostuvo.

Venezuela atraviesa una aguda crisis económica, con una hiperinflación que podría superar 13.800% este año, según el FMI, y 200.000%, de acuerdo con el Parlamento de mayoría opositora.

Maduro culpa en particular a Washington de aplicar un bloqueo mediante sanciones económicas, que a su juicio dificultan las importaciones de alimentos y medicinas.

“Derrotaremos la guerra criminal y económica contra el pueblo y le daremos estabilidad, paz y felicidad económica a nuestro pueblo amado. Lo juro”, acotó el jefe de Estado.

Durante el acto, la Fuerza Armada declaró nuevamente lealtad al mandatario y su compromiso “antiimperialista”, exhibiendo su músculo bélico: tanques y vehículos de combate antiaéreo destacaron en el desfile.

Varias mujeres desfilaron utilizando trajes con la bandera de Venezuela y paracaidistas aterrizaron frente a Maduro, que estaba acompañado por la primera dama, Cilia Flores, y el ministro de Defensa, Vladimir Padrino.

El presidente venezolano fue reelegido el 20 de mayo en unas cuestionadas elecciones, desconocidas por la oposición, varios países de la región -incluido Estados Unidos- y la Unión Europea.