Luis Barragán: Se nos fue Rosángela

Luis Barragán: Se nos fue Rosángela

Luis Barragán @LuisBarraganJ

Algún día se sabrá de los abundantes testimonios de lucha de los años anteriores, por humildes, no menos decisivos. Ante las más duras y difíciles circunstancias impuestas por un régimen que también contó con holgadas mayorías, podemos nombrar con orgullo a Rosángela Castellanos.

Ella integró el comité ejecutivo de la otrora CTV que enfrentó y derrotó al Chávez Frías de los mejores momentos y, junto a Carlos Ortega, corrió inmensos riesgos en la primera década de este siglo. No por casualidad, la menciona agradecido, con el finado Ramón Petit, en la larga entrevista que le concediera a Agustín Blanco Múñoz.

Aprendimos del mundo de los trabajadores, comprometidos con sus combates, también gracias al testimonio de vida de Rosángela, siempre caracterizada por un elevadísimo sentido de solidaridad. Inevitable mencionarlo, ella, como Petit, corrieron las consecuencias de identificarse con los esfuerzos que hicimos en la dirección del partido en el que, por entonces, militábamos, que nos desterró a César Pérez Vivas y al suscrito, no tardando Clemente Bolívar y Lucas Riestra, de la dirección política, haciéndose acreedores, ella y Ramon, de sendas sanciones dizque disciplinarias. Empero, lo más importante, fue la inquebrantable postura sindical que jamás claudicó ante la dictadura.





Inquebrantable, por desigual que fuese la lucha. Recordemos que, al no contar el llamado chavismo con la clase obrera, en momento alguno, estimuló y logró la deserción de aquellos cuadros que le eran extraños, corrompiéndolos, provenientes – incluso – de los partidos que tanto detestaba.

Una mujer políticamente comprometida, honrada y consecuente, objeto de no pocas persecuciones, a quien le parecía más importante el trabajo real que una cámara de televisión y de vida modestísima, ha muerto de una enfermedad que, seguramente, años atrás, pudo curar o, pr lo menos, prolongar la vida por unos años más. Se nos fue Rosángela y llegará el día que el país sepa que la transición democrática, se hizo también sobre sus hombros, actuando diligentemente dentro y fuera del país, en contra de lo que siempre supo que fue, y es, una dictadura.