A sus escasos 21 años la joven actriz Maisie Williams es una de las intérpretes más destacadas del panorama televisivo actual. Su papel de Arya Stark en “Juego de Tronos” le hizo alcanzar el estrellato como una de las protagonistas principales de una de las series de referencia a nivel mundial, reseña ABC.
Williams ha interpretado a la joven de la familia Stark desde los inicios de la serie, allá por 2011. Hizo el cásting cuando solo tenía 12 años, y a lo largo de las siete temporadas de la exitosa ficción de HBO, los espectadores de “Juego de Tronos” la han visto crecer y convertirse en la mujer que es hoy.
Sin embargo, no todo ha sido sencillo en el camino de Williams a la gloria. En una entrevista con The Australian, la joven reconoció que tuvo problemas con un tema concreto en sus inicios en la serie: el sexo. A menudo un tópico tabú, la joven tuvo que lidiar con escenas sexuales a su alrededor desde que comenzó a interpretar a Arya Stark, algo que quizá no fuera lo más adecuado para una niña de su edad.
“El sexo era algo bastante embarazoso e incómodo para nosotras”, confesó Williams al citado medio, hablando de ella y de su compañera de reparto Sophie Turner, que interpreta a su hermana mayor en la serie, Sansa Stark y que es gran amiga suya en la vida real. De hecho, las madres de ambas trataron de “alejarlas” de estas escenas sexuales mientras rodaban la serie, a pesar de que ninguna de las secuencias les afectó a ellas directamente.
Para leer la nota completa haga clic AQUÍ