Soy Venezuela quiere ratificar que se suma a la indignación del país por el trato humillante y violatorio de la dignidad humana que el régimen presidido por Nicolás Maduro ha infligido al diputado Juan Requesens.
Nota de Prensa
Desde hace una semana el régimen ha tratado de montar un proceso indebido y falaz, involucrando sin pruebas a dirigentes políticos en una supuesta conspiración. Tenemos que recordar que no es la primera vez que intentan algo parecido, violando en cada ocasión el debido proceso, la presunción de inocencia, y las condiciones de un juicio justo. En cada uno de los casos anteriores se ha involucrado a ciudadanos y dirigentes políticos sin que se les permitiera legítima defensa. Todo lo contrario, en cada oportunidad se ha mancillado el buen nombre, y se le ha tratado al margen de garantías y derechos.
Esta vez el régimen ha superado sus propios excesos. No solamente se ha valido de la espuria asamblea constituyente para practicar un simulacro de allanamiento de la inmunidad parlamentaria, sino que ha tratado de la manera más impropia al diputado Juan Requesens, mancillando su dignidad, sometiéndolo a un trato inaceptable, y obligándolo mediante algún tipo de tormento para que haga una declaración que lo auto incrimina en una supuesta acción contra el régimen.
SoyVenezuela no le da crédito alguno a esa declaración. El régimen no cuenta con credibilidad ni legitimidad. Sus métodos son abominables, la práctica de un socialismo policial, que irrespeta derechos, acosa familias y perpetra delitos con absoluta impunidad, deben ser rechazados terminantemente y denunciados a la comunidad internacional como una prueba más de la condición de víctimas que sufren millones de venezolanos.
Mientras el régimen quiere crear conmoción y miedo, los problemas del país se acumulan. La economía está devastada, los servicios públicos están colapsados, el sur de Venezuela se encuentra inundado sin que el régimen reaccione, el puente sobre el lago de Maracaibo sufrió daños mayores, y la cotidianidad de la gente está marcada por el hambre, la enfermedad y la violencia. Es obvio que el régimen quiere esconder la trágica realidad que ha provocado con sus malas políticas detrás del escándalo y el asco moral que inducen sus sombrías prácticas. Con esa actitud solamente logra hundirse más en el descrédito y en la repugnancia que provoca en los ciudadanos.
Soy Venezuela confía en la integridad de la mayoría de los venezolanos. Quienes cohonestan esta barbarie son pocos y merecen de todos nosotros el repudio más absoluto. Hacemos un llamado a todos los ciudadanos a que rechacen activamente esta situación y denuncien públicamente esta trama de mentira, violaciones y tortura.
Soy Venezuela exige la libertad plena del diputado Juan Requesens y el respeto a su inmunidad parlamentaria. Los excesos cometidos contra este joven y su familia demuestran que con este régimen solo se puede negociar su salida inmediata para proceder a iniciar una transición que nos conduzca de nuevo a la democracia y al respeto por el estado de derecho que todos merecemos.
Caracas, 11 de agosto de 2018