A principios de este año, Nicolás Maduro, lanzó su último plan para rescatar su economía, ofrecer una alternativa al cada vez más inútil bolívar y eludir las sanciones de Estados Unidos sobre las transacciones financieras. Pero la criptomoneda de Maduro, supuestamente respaldada por las reservas de petróleo de Venezuela, es una promesa hueca.
Por Nick Cunningham en Oilprice.com | Traducción libre del inglés por lapatilla.com
Sin duda, pocos analistas esperaban mucho del “petro”, la criptomoneda apresuradamente lanzada por Maduro. Se suponía que un petro estaba respaldado por un barril de petróleo, y unas grandes reservas de petróleo ubicadas en una parte específica de Venezuela se prometieron como respaldo para la nueva criptomoneda. Siempre fue un esquema extraño. Después de todo, ¿qué hace que el petro sea diferente del bolívar, la moneda oficial de Venezuela? ¿El valor y la fe en el bolívar tampoco están respaldados efectivamente por la riqueza petrolera del país?
Bueno, el bolívar no tiene valor, y Maduro quería comenzar de nuevo. Maduro pensó que el petro ayudaría al gobierno a evitar el alcance de las sanciones de Estados Unidos, al menos en teoría. Pero la nueva criptomoneda, como era de esperar, no logró alzar vuelo.
Se supone que el petro está respaldado por 5 mil millones de barriles de petróleo ubicados en Atapirire, un pequeño pueblo en una remota sabana de Venezuela en el medio del país. Las reservas en esta región son la pieza clave del petro, y como tales, están destinadas a suscribir el plan del régimen para la recuperación económica.
Pero como detalla Reuters en un informe especial , la región no solo carece de producción de petróleo, sino que no hay ningún esfuerzo visible para desarrollar el petróleo en esa área. La única evidencia de la presencia de petróleo son unas antiguas plataformas que han estado claramente inoperables durante mucho tiempo, ya que están oxidadas y cubiertas de malas hierbas. “No hay señales de que haya petróleo aquí”, dijo un residente local a Reuters. Peor aún, el pueblo sufre apagones, hambre, pobreza e infraestructura decrépita, una situación cada vez más común para el país en general.
En términos más generales, hay “poca evidencia de un próspero comercio de petróleo”, concluyó el corresponsal de Reuters Brian Ellsworth, luego de entrevistar a docenas de expertos en criptomonedas durante varios meses. Maduro dijo que la venta del petro se ha traducido en $ 3,3 mil millones en fondos para el gobierno, una afirmación que es sospechosa, por decir lo menos.
Incluso un ministro de gabinete involucrado en el proyecto dijo a Reuters que “nadie ha podido utilizar el petro … ni se han recibido recursos”, y que la tecnología para el token digital aún está en desarrollo. Y a diferencia de otras ofertas iniciales de monedas (ICO) para las criptomonedas que se inician, que pueden mostrar registros digitales de transacciones, hay poca evidencia que respalde la afirmación de Maduro de que la actividad comercial del petro está prosperando.
Además de la confusión monetaria, está la afirmación de Maduro de que el bolívar está ahora vinculado al petro. Ni siquiera está claro qué significa eso en la práctica, y los expertos dicen que es “inviable”, según reseñara Reuters. “No hay forma de vincular los precios o las tasas de cambio con un token que no se comercializa, precisamente porque no hay forma de saber para qué se vende realmente”, dijo a Reuters Alejandro Machado, un informático venezolano y consultor de criptomonedas que ha seguido de cerca el petro.
Daría risa si la crisis económica en Venezuela no fuera tan grave y la opresión y la mala gestión del gobierno de Maduro no impusieran un costo humano tan enorme.
Mientras tanto, la producción de petróleo de Venezuela continúa erosionándose a un ritmo acelerado. La producción cayó a solo 1,278 millones de barriles por día en julio, una baja de aproximadamente 50,000 bpd respecto al mes anterior y una caída de más de 500,000 bpd desde el cuarto trimestre de 2017.
Y no se ve posibilidad de mejora en el futuro previsible. Argus Media informó la semana pasada que las exportaciones de crudo venezolano podrían caer en un tercio en septiembre debido a una colisión de un petrolero en un terminal de exportación operado por PDVSA. La capacidad de la terminal podría verse obstaculizada por alrededor de 425,000 bpd durante el mes. “Pero esto supone que PdV logre reparar y reiniciar las operaciones del muelle a más tardar el 30 de septiembre”, le dijo un funcionario de la terminal de PDVSA a Argus.
Mientras tanto, el colapso continúa. Maduro necesitará encontrar algo mejor que un intento desafortunado e inepto de una nueva criptomoneda para resolver la profunda depresión del país.