La expresidenta brasileña Dilma Rousseff anunció este viernes que denunciará a un influyente pastor evangélico que, en mensajes en las redes sociales, la implicó indirectamente en el atentado que sufrió el Jair Bolsonaro, líder en los sondeos para las presidenciales de octubre.
EFE
“La campaña de Dilma Rousseff presentará una denuncia por injuria, calumnia y difamación contra el señor Silas Malafaia. Tendrá que responder por sus actos ante la Justicia”, según un comunicado divulgado por la asesoría de prensa de la ex jefe de Estado, que disputará el 7 de octubre un escaño en el Senado.
Malafaia, un influyente y polémico pastor de la Asamblea de Dios en Río de Janeiro que se ha caracterizado por sus posiciones políticas de derecha y que cuenta con miles de seguidores en las redes sociales, insinuó que Rousseff está involucrada en el atentado contra Bolsonaro, de quien el religioso es partidario.
“Atención pueblo bendito de Minas Gerais. El criminal que intentó matar a Bolsonaro es militante del Partido de los Trabajadores (PT) y asesora la campaña de Dilma al Senado en Minas Gerais. Dígale no a ella. Fuera Dilma”, escribió Malafaia en un comentario en su cuenta en Twitter.
Rousseff, la presidenta destituida por el Congreso en 2016 por irregularidades en la presentación de las cuentas públicas, intenta volver a la política como candidata a la Cámara Alta por Minas Gerais, su estado natal y en donde ocurrió el atentado.
El candidato ultraderechista fue acuchillado el jueves cuando participaba en un mitin en Juiz de Fora, la segunda mayor ciudad de Minas Gerais, por un hombre al que la Policía considera que actuó de forma aislada y sin ninguna vinculación partidaria.
El confeso autor del atentado actualmente carece de afiliación partidaria pese a que entre 2007 y 2013 fue militante del izquierdista Partido Socialismo y Libertad (PSOL), fundado por un grupo de disidentes del PT, la formación liderada por el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva y por Rousseff.
En su primer interrogatorio, el acusado del atentado, identificado como Adelio Bispo de Oliveira, se refirió a su odio a los políticos pero también dijo haber actuado “a mando de Dios”.
Un perfil de Facebook en nombre del autor confeso y cuyas fotos se identifican con la divulgada por la autoridades contiene varias publicaciones contra diferentes políticos, incluyendo a Bolsonaro, críticas a la masonería y relatos de supuestas conspiraciones.
Bolsonaro, al que una única cuchillada en el abdomen le provocó una grave hemorragia en una vena, tres heridas en el intestino delgado y una lesión en el colon, fue transferido este viernes al prestigioso Hospital Albert Einstein de Sao Paulo, uno de los más prestigiosos de América Latina y desde donde dijo que está bien y recuperándose.
El ultraderechista es uno de los candidatos más polémicos en la actual disputa debido a que es un defensor de la última dictadura militar en Brasil (1964-1985); ha generado diversas protestas por sus insistentes declaraciones machistas, racistas y homófobas, y enfrenta juicios por discriminación e incitación a la violación.
El atentado se produjo un día después de que una encuesta indicara que Bolsonaro, candidato por el Partido Social Liberal (PSL), vencería en la primera vuelta de las presidenciales que se realizará el 7 de octubre en un escenario sin Lula, cuya candidatura por la autoridad electoral debido a que el expresidente está preso y fue condenado por corrupción.
De acuerdo con el instituto Ibope, la intención de voto en Bolsonaro subió desde el 20 % en agosto hasta el 22 % en septiembre, lo que lo convierte en el favorito para vencer la primera vuelta tras la decisión del Tribunal Electoral de inhabilitar a Lula, que tenía hasta el 40 % del favoritismo.