Los miembros de la unión de ganaderos del occidente venezolano pierden 90.000 litros de leche al mes por cortes de energía impiden refrigerar el producto, dijo un portavoz de la agrupación. REUTERS
El estado Zulia fue una rica zona petrolera en la que además se producía un 70 por ciento de la leche y carne del país, pero ahora sufre las consecuencias de años de desinversión en materia eléctrica.
“Lo que sucede es que la luz se va por 10 horas y no tenemos cómo almacenar la leche fría para que se conserve”, dijo a periodistas Omar Márquez, presidente de la Unión de Ganaderos del Municipio Rosario de Perijá (Ugavi), en el occidente de Zulia.
Cuando comienza la acidificación de la leche, “podemos hacer queso, pero aquí no se consigue cuajo (la sustancia para cuajar la leche), así que igual se pierde, lo que hacemos es botarla y eso da dolor”, agregó.
“Es más lamentable que en medio de esta crisis de desabastecimiento que hay, nosotros no tengamos cómo sacar la leche al mercado por fallas eléctricas”, refirió.
Venezuela atraviesa su peor crisis económica de los tiempos modernos como consecuencia de la caída de la producción de petróleo, con hiperinflación, recesión y escasez de alimentos y medicinas.
Ugavi reúne unas 500 fincas productoras de leche que generan juntas más de 3.000 litros de leche diarios, detalló Márquez.
Solo el cinco por ciento de las fincas de la región tiene plantas eléctricas para resistir durante los apagones, dijo el representante ganadero.
El Ministerio de Comunicación no respondió de inmediato una solicitud de comentarios.
Ángel Rincón, directivo de la Federación de Ganaderos de Venezuela (Fedenaga), dijo que “no podemos aguantar esto por mucho tiempo, porque hay múltiples razones, primero las fallas eléctricas, la falta de efectivo para pagarle a los trabajadores (…) Estamos llegando al punto de no retorno”.