Credit Suisse no combatió debidamente prácticas de lavado de dinero en supuestos casos de corrupción vinculados a la FIFA y a compañías estatales de Brasil y Venezuela, dijo el lunes el regulador financiero suizo, FINMA, en un revés para la reputación del prestamista.
FINMA dijo que nombrará a un auditor independiente para que supervise los procedimientos contra lavado de dinero del banco, aunque no pidió que la compañía regrese utilidades que pudo haber conseguido ilegalmente. El regulador no tiene autoridad para multar a los prestamistas que supervisa.
El segundo mayor banco de Suiza, por detrás de UBS, no cumplió con sus obligaciones de combatir la corrupción cuando sostenía “una relación de negocios significativa” con una persona expuesta políticamente, dijo el lunes el regulador.
Credit Suisse dijo en un comunicado que la autoridad suiza había detectado “debilidades legales” y añadió que ha tomado acciones para cumplir mejor con los requerimientos desde que el presidente ejecutivo Tidjane Thiam asumió el cargo en 2015 de manos de su predecesor, Brady Dougan.
En lugar de sancionar a un importante banquero privado que violó las regulaciones durante años, FINMA dijo que Credit Suisse optó por elevar su salario.
Una fuente de la industria de banca identificó al operador como Patrice Lescaudron, condenado en febrero a cinco años de prisión.
“Las faltas identificadas ocurrieron reiteradamente durante varios años, mayormente antes del 2014”, dijo FINMA, y agregó que muchos de los problemas emergieron en la unidad del banco Clariden Leu AG, que se fusionó por completo con Credit Suisse en 2012.
“FINMA identificó las deficiencias en los procesos contra el lavado de dinero, además de faltas en los mecanismos de control y manejo de riesgos”, dijo la autoridad.
La amonestación a Credit Suisse surgió a partir de una investigación de FINMA a varias instituciones financieras de Suiza que comenzó en 2015, en relación a supuestas prácticas corruptas que involucrarían al ente rector del fútbol mundial, la FIFA; a la estatal venezolana PDVSA y a la petrolera estatal brasileña Petrobras.
Thiam se ha visto forzado a encarar reiteradas acusaciones de malas prácticas que según dijo se cometieron en Credit Suisse antes de su arribo, incluyendo denuncias de manipulación cambiaria en Europa, un esquema de corrupción en Asia y una pesquisa de sobornos que implicarían unos 1.000 millones de dólares relacionada con la venezolana PDVSA.
El año pasado FINMA reprendió a Credit Suisse por sus negocios con el fondo estatal malasio 1MDB. El banco central de Singapur también multó al banco por violar las normas contra lavado de dinero en el mismo caso.
Analistas dijeron que la severa postura adoptada por el regulador y la creación de un ente supervisor especial podrían mermar la confianza en los esfuerzos de Credit Suisse para restaurar su imagen pública.
Reuters