La organización venezolana Expresión libre, comunicadores por la paz y la democracia, rechazaron este lunes mediante un comunicado la arbitrariedad que se registró en la detención del periodista Isnardo Bravo, al cual el Gobierno bolivariano le impidió salir del país.
“El insistente acoso contra los periodistas y los medios es innegable en Venezuela y la ONG Expresión Libre expresa su total rechazo a estos actos que violan tanto nuestra propia Constitución Nacional como los más elementales principios de respeto a los Derechos Humanos, como lo es la liberad de expresión”, relata el texto.
A continuación el comunicado integro:
Una vez más los abusos del gobierno nacional recaen sobre la prensa y los periodistas atentando contra LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN.
Esta vez le tocó al colega Isnardo Bravo, periodista comprometido con la verdad y el equilibrio de la información, quien fue detenido en el Aeropuerto de Maiquetía cuando salía de viaje familiar con su hija, y sin ninguna razón, fue llevado a la sede del DGCIM de Boleíta para responder a un interrogatorio durante 9 horas.
El insistente acoso contra los periodistas y los medios es innegable en Venezuela y la ONG Expresión Libre expresa su total rechazo a estos actos que violan tanto nuestra propia Constitución Nacional como los más elementales principios de respeto a los Derechos Humanos, como lo es la liberad de expresión.
INFORMAR NO ES DELITO, es uno de nuestros lemas y seguiremos manteniéndolo hasta que las autoridades gubernamentales lo entiendan; porque el principio democrático se sustenta tanto en el derecho de los ciudadanos a estar informados, lo que se logra con el trabajo de los periodistas a través de los medios de comunicación, como el derecho a expresarse libremente utilizando para ello la radio, televisión, los diarios y las redes sociales.
Dejamos constancia como defensores de todas las libertades que deploramos este hecho y cualquiera que atente en contra de los periodistas, reporteros gráficos, camarógrafos y medios de comunicación.
A la hora de redactar este comunicado, ya nuestro colega está en libertad, pero nos preguntamos ¿Quién responde por esta arbitraria detención? ¿A su tiempo perdido? ¿Al miedo que pudo haber sentido su hija al ver retenido a su padre? ¿A un viaje familiar frustrado? En conclusión, a un abuso y a una detención que no tenía por qué haber sucedido.
En Caracas, 24 de septiembre del 2018